Las madres de varios jóvenes asesinados por miembros del Ejército en el gobierno de Álvaro Uribe, acusaron al entonces ministro de defensa, Juan Manuel Santos, de estar involucrado en los homicidios del 2008.

La temeraria declaración fue hecha por la activista colombiana, Nancy Sánchez; quién estuvo apoyada en su denuncia por María Ubilerma Sanabria, una de las madres de los jóvenes víctimas de las ejecuciones extrajudiciales en Soacha.

Las mujeres expresaron su opinión en un acto organizado por Amnistía Internacional en la Universidad de Salamanca, al que asistieron varios periodistas internacionales para cubrir el evento.

Bajo el lema «Las ejecuciones extrajudiciales son crímenes de Estado», las llamadas «Madres de Soacha» claman justicia para sus hijos que fueron ejecutados por las Fuerzas Militares y cuyos cadáveres se presentaron como «guerrilleros muertos en combate», según palabras de la propia Sánchez.

La campaña de las mujeres proseguirá en Alemania, Bélgica, Irlanda, Holanda y Dinamarca, con el fin de conseguir apoyo internacional en su lucha contra la impunidad.