El Gobierno venezolano dijo el miércoles que entregará a Bogotá a tres ciudadanos colombianos buscados por la justicia de ese país, en una muestra del buen momento que pasan las relaciones entre las dos naciones andinas.

En un comunicado oficial, Venezuela aseguró que expulsará a Osvaldo Espinoza, Nilson Navarro y Priscila Ayala Mateus, por actividades vinculadas con el secuestro y otros delitos.

En Bogotá se informó que Espinoza es miembro de las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC), en tanto que Navarro y Ayala pertenecen a la guerrilla del Ejército de Liberación Nacional (ELN).

Las FARC son el mayor grupo rebelde del país y son consideradas como una organización terrorista por Estados Unidos y la Unión Europea.

«El Gobierno Bolivariano ratifica así su compromiso inquebrantable en la lucha contra la delincuencia y la criminalidad, en estricto cumplimiento de los compromisos internacionales, y bajo los principios de paz, solidaridad y respeto a los derechos humanos», añadió el comunicado.

Caracas dijo que mantiene detenidos a otros cuatro colombianos por secuestro, pero que serán sometidos a los tribunales locales debido a que no están requeridos por las autoridades colombianas.

El martes, Colombia dijo que hará las gestiones para extraditar a Venezuela al acusado narcotraficante Walid Makled, un nuevo hecho positivo en el proceso de normalización de las relaciones diplomáticas entre los dos países .

Los anuncios se dan en medio de un clima de entendimiento entre Colombia y Venezuela después de la profunda crisis que llevó al gobernante de izquierda Hugo Chávez a romper relaciones diplomáticas con Bogotá y a congelar el comercio binacional, que en el 2008 alcanzó más de 6.000 millones de dólares.

La crisis entre los vecinos se originó durante el Gobierno del ex presidente Alvaro Uribe, quien mantuvo unas tensas relaciones con

Chávez por temas de seguridad como la guerrilla izquierdista y un acuerdo de cooperación militar con Estados Unidos que quedó sin vigencia este año por decisión de un tribunal colombiano.

REUTERS