El hecho se registró en el municipio de Caicedonia en el norte del Valle, donde los productores de fruta tiraron sobre la carretera que va hacia Armenia al menos 30 toneladas de cítricos, esto como señal de protesta ante los altos costos de producción y los bajos costos de la oferta.
Los campesinos realizaron esta protesta por las pérdidas de más de 28 mil millones de pesos que representa el 40 por ciento de la producción total del año. Los cultivadores aseguran que sacar al mercado la cosecha no es rentable pues el kilo lo están pagando a 100 pesos cuando producirlo cuesta más de 250 pesos.
Además en el casco urbano de Caicedonia los productores prefirieron regalar alrededor de dos toneladas de naranjas y mandarinas, y como si fuera poco hay al menos 150 toneladas almacenadas que se encuentra proceso de descomposición en una de las plantas de postcosecha del municipio.
A pesar del repudio de la comunidad por el desperdicio del alimento los campesinos y miembros de dignidad cafetera que hicieron parte de esta protesta, aseguraron que esta lamentable práctica es el reflejo de la dura crisis del agro colombiano.
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