Los presidentes de la región acordaron este viernes reunirse una vez al año para discutir estrategias contra el tráfico de drogas y llamaron a aumentar los fondos internacionales para contrarrestar una poderosa industria que calculan maneja al menos 400.000 millones de dólares anuales.
También para discutir la posibilidad de crear un fondo multinacional, que administre alguna instancia como el Banco Interamericano de Desarrollo o la Organización de Estados Americanos (OEA), para que países pequeños de Centroamérica y el Caribe puedan disponer de plata para esa lucha antidrogas.
La Declaración de Cartagena no trajo grandes novedades, sino que ratificó temas discutidos por los países de la zona desde hace varios años, como cooperar en asuntos que van desde intercambiar datos entre las policías hasta mecanismos para fomentar cultivos alternativos.
Pero fue en los discursos donde surgieron algunas ideas más concretas, como una oferta de Calderón, quien dijo que su país estaba dispuesto a compartir y alimentar una base de datos que esta creando, llamada “Plataforma México”, con nombres de traficantes y delincuentes, a la que se puedan sumar datos de otras naciones, sobre rutas usadas por traficantes y mecanismos de operación de esas bandas mafiosas. “Hay una globalización del crimen, no reconoce fronteras…operan a escala global y en consecuencia la acción de nuestros gobiernos también debe ser global”, dijo Calderón.
Por un fondo
Por su parte, Leonel Fernández, de República Dominicana, lanzó la idea del fondo. Aunque no se mencionó cuál sería el capital semilla de ese fondo, ni quiénes aportarían, la mayoría de los dignatarios destacaron que muchos desvían actualmente dineros para el combate de las drogas a cubrir, por ejemplo, alzas en costos de los alimentos y de los combustibles, debido a los altos precios internacionales del crudo, según Fernández.
Fernández y Saca, su colega de El Salvador, destacaron por ejemplo que si bien el llamado Plan Mérida, aprobado recientemente por Washington con desembolsos previstos de unos 1.500 millones de dólares en los próximos tres años para la lucha antidrogas en México, dispone de fondos para sus países, las proporciones de esas ayudas son demasiados pequeñas y hasta “un chiste”.
De los 1.500 millones de dólares, dijo Fernández, a la República Dominicana le corresponderían 2,5 millones de dólares. “Aunque agradecemos cualquier aporte, destacamos que son insuficientes, inclusive para hacer los más mínimos esfuerzos”, dijo el dominicano.
“La iniciativa Mérida es buena, pero no es suficiente…por supuesto que los países no podemos sentarnos a esperar que nos caiga del cielo”, la ayuda, dijo Saca a su turno. Del plan a El Salvador le corresponderían “siete millones de dólares, eso es un chiste para los dineros que maneja el narcotráfico”, dijo Saca, quien después escuchó como el canciller venezolano Maduro calculaba que las bandas narcotraficantes manejaban anualmente entre 400.000 a 500.000 millones de dólares.
Duras penas a narcos pide Uribe
Colombia exigirá a Estados Unidos la imposición de una “pena mínima severa” a los narcotraficantes que sean extraditados desde el país, anunció este viernes en Cartagena el presidente Álvaro Uribe.
Uribe rechazó que traficantes del país sean condenados a “una pena prácticamente indulgente que se convierte en motivo de burla” merced a negociaciones con los jueces norteamericanos.
“Extraña mucho cuando se oye decir que (…) que un narcotraficante pagó una pena mínima y sale a vivir como un rey”, afirmó el jefe de Estado en la apertura de la Cumbre Regional Ampliada sobre el Problema Mundial de las Drogas, Seguridad y Cooperación del Caribe, Centroamérica, Colombia, México y Venezuela.
Lucha contra el narcotráfico es de corresponsabilidad
Así mismo Uribe Vélez instó a no dividir a los países entre productores y consumidores de droga e invitó a sus colegas de El Caribe, Centroamérica, México y Venezuela a enfrentar unidos el flagelo del narcotráfico.
“Mi invitación es que trabajemos todos, que dejemos de decir es que yo soy productor porque aquel es consumidor. Que seamos conscientes que los países productores corremos el riesgo de que vaya creciendo el consumo”, dijo a periodistas antes de la apertura oficial de una cumbre regional sobre drogas.
Hay que mirar el problema “con celo de padre de familia, mucho más que con cálculo político de Estado”, agregó el mandatario.
Venezuela ratifica su compromiso
El canciller venezolano, Nicolás Maduro, ratificó este viernes en la Cumbre la voluntad del presidente de su país, Hugo Chávez, de profundizar la cooperación en la lucha contra el narcotráfico.
Es un compromiso contra la producción, el tráfico y el consumo “en nuestro continente y a nivel del mundo”, señaló Maduro al intervenir como representante de Chávez en esta cita.
Maduro dijo que su gobierno también reitera su interés por “perfeccionar los mecanismos de coordinación” entre los organismos que en cada país combaten este flagelo.
Sin embargo, defendió la independencia y autonomía de Venezuela en su política contra el narcotráfico, que, según dijo, es manejado por “una burguesía trasnacional sumamente poderosa” que es estimulada por el capitalismo y, dentro de éste, por el consumo en las sociedades “desarrolladas del norte”.
En Venezuela, subrayó Maduro, “hemos hecho el esfuerzo para construir una estrategia nacional soberana en la lucha contra el tráfico de drogas”.
Por el calentamiento global
Uribe también propuso este viernes que la lucha antidrogas se incluya en la campaña del mundo contra el calentamiento global. “Quería sugerirles a ustedes que en la lucha contra el calentamiento global se incluya la lucha contra las drogas ilícitas”, expresó el mandatario.
Colombia, puntualizó luego, tiene “en las drogas ilícitas el enemigo principal contra nuestra selva, cuyo cuidado debe ser nuestra primera contribución en esa estrategia contra el calentamiento global”.
En cifras
Uribe resaltó que el 51 por ciento del territorio colombiano, que suma 1,16 millones de kilómetros cuadrados, es selvático. “El gran enemigo de las selvas es la droga”, continuó Uribe, y apuntó que los narcotraficantes han destruido en su país más de dos millones de hectáreas para establecer en ellas cultivos ilícitos.
El más reciente informe de la Oficina de las Naciones Unidas contra la Droga y el Delito (UNODC) muestra que este país registraba hasta el pasado diciembre 99.000 hectáreas sembradas con cocales.
El estudio también indica que Colombia se mantuvo como el primer productor mundial de cocaína, con unas 610 toneladas anuales.
“Nuestra gran contribución en la estrategia contra el calentamiento global tiene que ser la preservación de nuestra selva”, insistió Uribe.