El proyecto de ley de reforma financiera que pasa a segundo debate aún tiene un punto álgido en el que no se logran poner de acuerdo los que participan de la discusión. Se trata de la figura del Defensor del Cliente. El punto que más divide es el de la constitucionalidad y la obligatoriedad de los fallos emitidos.
Para la defensora del cliente del Banco Colpatria, Consuelo Rodríguez Valero, no es conveniente que se tenga un defensor por producto, como aparece en este momento en el proyecto de ley.
Rodríguez Valero señala que es la entidad bancaria la que debe tener la potestad de decidir si las determinaciones del Defensor del Cliente son o no de obligatorio cumplimiento. “Es la asamblea de accionistas de la entidad la que decide acerca de la obligatoriedad”.
De otra parte, la funcionria bancaria aseguró que es conveniente que se obligue al cliente adelantar su queja en una de las instancias que existen para hacerlo, pero no en las dos. Sólo lo podrá hacer ante el banco o ante el defensor de la entidad.
El otro de los puntos que calienta el debate es el de las tarifas que cobran los bancos a los usuarios. La Defensora del Cliente de Colpatria dijo que no sólo se debe obligar a los bancos a que publiquen las tarifas como efectivamente se va a hacer desde el 1 de enero del 2009, sino que además deben informarle al usuario los aumentos que van a tener al menos en los próximos 30 días.
Además la Defensora del Cliente dijo que no se justifica de ninguna manera que un banco le cobre a un cliente cuando hace una llamada al ‘call center’. “Si le contesta una persona y no una máquina, se le están cobrando $3.000 por este servicio”, aseguró.
TOmado del Colprensa