Un informe de la Personería de Bogotá detalla que el Distrito se apropió de una serie de terrenos para la construcción de la troncal de Transmilenio. Predios que fueron demolidos y luego abandonados y que hoy son fuente de inseguridad en los sectores donde se ubican.

Según el informe, después de la adecuación urbanística de los corredores viales del Sistema Masivo TransMilenio, en tres troncales hay lotes o predios sobrantes que pertenecen al Distrito, que ahora están abandonados y sin dolientes.

Se trata de 120 los predios que están subutilizados y se encuentran en las troncales Norte Quito Sur (NQS), Suba y un sector de la Calle Ochenta. Estos sitios ocasionan contaminación ambiental, son depósito de escombros, basuras, roedores, sirven de lugar de vivienda a los habitantes de la calle y son foco de inseguridad para los ciudadanos. Así lo revela una veeduría de la Personería Delegada del Medio Ambiente.

Según el informe, las entidades distritales no tienen claridad sobre el uso que deben darle a estos lotes. Además desconocen el número exacto de predios de la ciudad en estas condiciones.

El Organismo de Control estableció, también, que el Instituto de Desarrollo Urbano (IDU) adquiere los predios a particulares y no realiza la actualización catastral que permite identificar al nuevo propietario, lo que origina que aparezcan como titulares los antiguos dueños y a quienes el Distrito les sigue cobrando los impuesto predial y de valorización.