En un partido que no se podía perder, el equipo femenino colombiano de fútbol sub 17 cayó ante las locales de Nueva Zelanda tres goles por uno. Las patriotas se veían como favoritas ante un local que había perdido en dos ocasiones consecutivas mientras que Colombia había empatado. Los dos equipos quedaron eliminados.
Las campeonas suramericanas, que encararon la jornada con dos puntos menos que norteamericanas y danesas (cada selección con cuatro puntos), eran conscientes de que sólo les valía la victoria para tener opciones de rebasar a las colíderes del grupo.
Las jugadoras de Nueva Zelanda estaban eliminadas del torneo antes de jugar con Colombia al sumar dos derrotas. Sin embargo, al combinado de Paul Temple, que se midió a la tricolor en la capital, le quedó el incentivo de convertirse en la primera selección kiwi de la historia en ganar un partido en un gran campeonato de la Fifa.