El Fondo Monetario Internacional, FMI, reconoció ayer en Bogotá que las autoridades de Colombia “han respondido con prontitud” a la actual crisis financiera mundial.
Con ello han ayudado a reforzar la confianza interna, consideró el jefe de División del Departamento del Hemisferio Occidental del FMI, Benedict Clements, para quien el país “ha resistido bien la turbulencia en los mercados financieros internacionales”.
“Las primas de riesgo de deuda soberana, la bolsa de valores y la tasa de cambio se han comportado, en general, de manera similar al resto de América Latina”, dijo Clements al poner fin a una misión de supervisión de semana y media a Colombia.
Clements, cabeza de la delegación, destacó que pese a esta coyuntura “los mercados de deuda doméstica e interbancario han seguido funcionando sin trastornos, y no se han observado señales de presiones de liquidez”.
El FMI apoya el deseo del Gobierno del presidente Álvaro Uribe de mantener las metas fiscales para 2009, agregó el alto cargo de la entidad, para quien “ello tiene un impacto muy favorable para dar confianza”.
Además, subrayó, las necesidades colombianas de financiamiento “son modestas”, debido a que el país se ha asegurado, con la banca multilateral, la financiación previa para 2009.
“Es muy buena estrategia para mantener las metas fiscales en 2009”, consideró Clements, quien observó que en las reuniones que mantuvo con altos cargos del Gobierno, estos le ratificaron el “compromiso muy fuerte para continuar con una política fiscal muy disciplinada el año próximo”.
El jefe de la misión a Colombia dijo que para el país, que ha tenido un “desempeño sólido en los últimos años”, las condiciones externas menos favorables suponen un desafío.
El crecimiento de socios comerciales clave para Colombia se debilita por efecto de la crisis financiera, lo que causa una “caída sustancial” en los precios de los productos básicos, explicó.
“En este contexto, y bajo condiciones de demanda doméstica menos boyantes que en años recientes, se proyecta una desaceleración del crecimiento económico en el período 2008-2009, antes de su recuperación en 2010 a medida que la economía mundial se fortalezca nuevamente”, señaló Clements.
El funcionario del FMI también dijo que es de esperarse que la inflación colombiana se reduzca en 2009, por efecto de la política monetaria de los últimos años y los menores precios internacionales de alimentos y combustibles.
Clements dijo que “también será necesario que el tipo de cambio continúe fluctuando con flexibilidad para ayudar a que la economía colombiana se ajuste a los choques externos”.
Agencia EFE