–Estados Unidos se mostró preocupado por la creciente tensión entre Pakistan y la India y salió rápidamente a pedirles prudencia. “Esperamos que ambas partes puedan evitar los pasos que lleven aun aumento innecesario de las tensiones…”, expresó el vocero de la Casa Blanca, Gordon Johndroe.
El funcionario añadio que el gobierno estadounidense está en estrecho contacto con las autoridades de los dos países.
El conflicto entre Pakistan y la India se agudizó en las ultimas horas al conocerse que el gobierno paquistaní está moviendo miles de soldados desde su frontera afgana hacia la india.
El gobierno de Nueva Delhi, que pidió a sus ciudadanos no viajar al país vecino, comenzó una serie de consultas diplomáticas para frenar un posible conflicto y, al mismo tiempo, convocó a una reunión de emergencia a su Estado Mayor Conjunto.
La nueva escalada de tensión entre ambas potencias nucleares es una consecuencia directa de los atentados que sufrió la ciudad india de Bombay en noviembre pasado. Fue cuando un grupo de terroristas atacó varios objetivos de la próspera ciudad y dejó 172 muertos.
Las autoridades indias culparon a un grupo islamista basado en Pakistán y exigió que su vecino coopere con la investigación. Por su parte, Islamabad respondió que le presente pruebas de esas acusaciones.
Aunque, los dos países aseguran que no buscan la guerra, que sería la cuarta entre ambos desde su independencia en 1947, confirmaron que responderán en caso de que el otro ataque.
Pero el conflicto también preocupa a otros Estados: cualquier recorte significativo de las tropas paquistaníes en la frontera afgana podría suponer un incremento de los atentados contra las fuerzas extranjeras en Afganistán. El ejército paquistaní ya ha reducido en los últimos meses sus operaciones contra los militantes vinculados con los talibán.
Este viernes, fuentes de inteligencia de ese país reconocieron un nuevo movimiento de tropas. Al mismo tiempo, se anularon “los permisos de todo el personal operacional” del ejército, declaró esa fuente anónima.
Los dirigentes militares paquistaníes imitaron, según aclaró esa fuente, las medidas que creen que la India ya tomó en las últimas semanas.
Al conocerse el movimiento de tropas, el gobierno indio pidió a sus ciudadanos que no viajen a Pakistán, convocó a sus altos jefes militares y comenzó una serie de rondas de consultas con otros Estados para frenar la crisis.