Uno de cada cuatro guerrilleros en Colombia es un niño: RWANDA
“En el conflicto armado colombiano uno de cada cuatro combatientes es un niño. Lo alarmante es que se están utilizando pequeños desde los seis años para trabajos de inteligencia, sembrar minas antipersona, llevar explosivos”, precisó Sergio Tapia, del Tribunal Internacional sobre la Infancia afectada por la guerra y la pobreza de la Misión Diplomática Internacional Humanitaria, RWANDA.
El informe anual sobre la situación de los niños en Colombia, aseguró que la situación de los menores en el conflicto armado colombiano es similar a la de los niños en el Congo.
“En Colombia se ha venido cometiendo un genocidio a cuentagotas contra la infancia por parte de los actores del conflicto armado. La situación de la infancia es tan grave que por eso hemos dicho que para nosotros Colombia es el Congo de América Latina”, indicó el presidente del Tribunal, el argentino Sergio Tapia.
El informe indica que el reclutamiento de menores en el país “muta de actor en el conflicto, de grupo armado a miembro de bandas criminales y viceversa”.
Según la investigación del Tribunal, la problemática del reclutamiento de menores en estructuras ilegales está inmersa en casi todo el país, pero que el fenómeno es mucho más fuerte en las fronteras.
En este sentido, llamó la atención sobre los niños colombianos afectados por el conflicto que logran huir hacia otras naciones fronterizas, de los que dijo “ningún otro gobierno se quiere hacer cargo de ellos y muchas veces son discriminados en las escuelas de esos países”.
“Muchos de ellos se escapan por la frontera colombo-ecuatoriana, llegan a Ecuador y allí no pueden decir que son combatientes reclutados. Esto también ocurre en Panamá y en otros países fronterizos. Vemos que no hay una política de integración con los niños refugiados colombianos”, recalcó Tapia.
Además aseguró que los niños indígenas y afrocolombianos son más vulnerables al reclutamiento por “encontrarse en zonas de interés de los grupos armados ilegales, en zonas olvidadas y acosadas por la guerra”.
Finalmente, hizo un llamamiento para que se detenga el reclutamiento de menores en 2009, e indicó que los niños en el conflicto colombiano, son “una bomba de tiempo muy peligrosa” a la que debe prestársele mayor atención.