La Policía Nacional, mediante labores de inteligencia e investigación criminal, y con el apoyo de la Fiscalía General de la Nación, capturó a siete integrantes de una red internacional dedicada al tráfico de estupefacientes, con conexiones en varios países de América Latina y en alianza estrecha con el frente 48 de las Farc.

Durante las diligencias, que se realizaron simultáneamente en Armenia, Cúcuta, Bogotá y Barranquilla, fueron detenidos Jesús Antonio Galvis Quiceno, alias ‘Orlando’, cabecilla de la organización y seis de sus colaboradores más inmediatos.

Al término de la ‘Operación Barcelona’, la Policía Nacional confirmó que estas personas hacían parte de una simbiosis criminal entre los herederos del antiguo cartel del Norte del Valle al mando del extinto Wilber Alirio Varela, alias ‘Jabón’ y los comandantes del frente 48 de las Farc, conocidos como ‘Edgar Tovar’ y alias ‘Oliver’.

La información acreditada por los investigadores advierte que ante la desaparición de la organización liderada por ‘Jabón’ y su más enconado rival, el extraditado Diego León Montoya Sánchez, alias ‘Don Diego’, así como la neutralización de narcotraficantes netos de las Farc como Tomás Medina Caracas, alias ‘El Negro Acacio’, se consolidó una relación interdependiente entre la quinta generación mafiosa con injerencia en el suroccidente colombiano y los terroristas del frente 48, dueños y custodios de los laboratorios que todavía existen en departamentos como Putumayo y Nariño.

La inteligencia policial estableció que Diego Pérez Henao, alias ‘Diego Rastrojo’ y Ángel Gabriel Lozada García, alias ‘Edgar Tovar’, pactaron una alianza para exportar cocaína a destinos como Estados Unidos, México, España e Italia, desde Colombia y algunos países vecinos, como es el caso de Venezuela, Ecuador y Perú.

La organización criminal, que además acudía a la clonación de tarjetas de crédito y a la falsificación de documentos valiéndose de la delincuencia común, tenía capacidad para enviar hasta dos toneladas de cocaína mensuales.

Según los investigadores, gracias a esta modalidad, los llamados ‘Rastrojos’ y el frente 48 de las Farc, lograron lavar grandes sumas de dinero con las cuales el grupo narcoterrorista adquirió armas, material explosivo y medios de comunicación empleados en ataques como los protagonizados contra la infraestructura petrolera en el sur del país.

Adicionalmente, esta simbiosis criminal de la que hacían parte oficinas de cobro integradas por narcotraficantes y subversivos, realizaba el ajuste de cuentas acudiendo a la tortura bajo prácticas como la incineración con ácido, el homicidio y la intimidación familiar. Para garantizar el envío de la droga y eludir los controles a los canales de distribución y las labores de interdicción de las unidades antinarcóticos, los delincuentes optaron por la trata de personas como mecanismo para engañar personas reclutadas, principalmente en el Valle del Cauca, y convertirlas en “mulas”. En algunos casos, los también denominados “correos humanos” eran extranjeros. De hecho, la inteligencia policial tiene documentados dos casos, uno en Ecuador y otro en Curazao.

El 13 de Junio del año pasado, la policía ecuatoriana capturó a Edgar González Micolta, alias ‘El Negro Antonio’, quien además de ser el principal contacto entre el frente 48 de las Farc y la estructura narcotraficante que hacía envíos de droga hacia Europa, Norte y Centroamérica, fue sindicado de fraguar un atentado contra el presidente Rafael Correa.

La lista de capturados en la “Operación Barcelona” la complementan: – Samuel Augusto Bautista (capturado en Bogotá) – Luis Ángel Lozada Barbosa (capturado en Bogotá) – José Alexander Caballero (capturado en Bogotá) – Sven Martín Berg Vargas (capturado en Cúcuta) – Julio Tobías Castro Rodríguez (capturado en Cúcuta) – Alonso Gil López (capturado en Barranquilla)

Cabe señalar que ante la evidencia recaudada, la Policía Nacional y las agencias internacionales adelantan gestiones conjuntas en el marco de los acuerdos de cooperación vigentes en la lucha contra el crimen trasnacional, para tramitar órdenes de captura con fines de extradición en el caso puntual de ‘Edgar Tovar’ y ‘Diego Rastrojo’, por quienes se ofrece una recompensa de hasta mil 700 millones y 250 millones de pesos, respectivamente.

ANNP