El grupo separatista vasco ETA asumió su autoría en el reciente asesinato de un empresario y amenazó con nuevos atentados contra el proyecto de construir en la región una red de ferrocarriles de alta velocidad.

En un comunicado remitido al diario independentista vasco Gara, ETA admitió su participación en la muerte de Ignacio Uría, de 71 años, asesinado a tiros el pasado 3 de diciembre cuando salía de su trabajo.

Según Gara, la organización armada señaló que la empresa de Uría participaba en la construcción del tren de alta velocidad en el País Vasco y el norte de la nación, y aseguró que seguirá atentado contra este proyecto y las personas que trabajan en el mismo.

ETA ha asesinado a más de 825 personas desde 1968 y habitualmente reivindica sus atentados a través de comunicados enviados a Gara.