El nuevo esquema del Pico y Placa, decretado por el alcalde Samuel Moreno Rojas, que amplia los horarios de restricción a partir del 6 de febrero tanto para servicio particular como público colectivo, reducirá la contaminación en un 30 por ciento en promedio en la ciudad.

Así lo determinaron las proyecciones realizados por técnicos de la Secretaría Distrital de Ambiente y estudios adelantados por la Universidad de los Andes.

El impacto que tendrá la medida a nivel medio ambiental es significativo por cuanto se reducirá 5.124 toneladas diarias de Dióxido de Carbono (CO2), 863 de Monóxido de Carbono (CO), 24 de Óxidos de Nitrógeno (NOx) y 105 de Hidrocarburos (THC).

La salida de circulación de más 500 mil vehículos particulares que tendrán que estar inmovilizados entre las 6 a.m. y las 8 p.m. es la razón para que se presente la reducción de contaminantes que producen efectos perjudiciales para la salud de los bogotanos y para el medio ambiente.

Ante la medida que estará vigente durante dos años, debido a la construcción de la Fase lll del Transmilenio, el Secretario de Ambiente, Juan Antonio Nieto, manifestó que “esta medida mitigará los trancones y mejorará la calidad del aire que respiramos diariamente”.

Aseguró que el nuevo Pico y Placa beneficiará tanto el tiempo de los bogotanos como su salud y el ambiente: “El 30 por ciento de reducción en la contaminación del aire es sin lugar a dudas una cifra relevante”.

El nuevo Pico y Placa garantizará una mejor condición en la salud de los capitalinos y en el cuidado del medio ambiente. Se reducirán los contaminantes que dejan secuelas en la salud de las personas; se mitigará el efecto invernadero y se disminuirá la problemática de polución del aire.

Para el gobierno de la ‘Bogotá Positiva’ es importante tanto los temas de movilidad como los ambientales, razón por la cual se celebrará el jueves 5 de febrero la décima versión del ‘Día sin carro’, que ahora se llama ‘Día del Aire Limpio’, jornada en la que no circulan los vehículos particulares.