–Los gobiernos de Colombia y Ecuador confirmaron para este martes la reunión de sus respectivos cancilleres para tratar los llamados “temas sensibles”, que tienen que ver con las secuelas del bombardeo al campamento de las Farc en territorio ecuatoriano y avanzar en el proceso de normalización de relaciones entre los dos paises.

El canciller del Ecuador, Fánder Falconí, informó que el encuentro se producirá en la ciudad ecuatoriana de Ibarra, en el marco de la denominada Comisión de Consideraciones Sensibles, para continuar el cumplimiento de la hoja de ruta establecida con el Canciller de Colombia, Jaime Bermúdez.

La reunión bilateral estará facilitada por el Centro Carter y por la OEA y en la misma se tratarán temas como el bombardeo de Angostura, principalmente, dijo Falconí.

“Hay la voluntad política de los dos Presidentes, Rafael Correa y Álvaro Uribe de convocar a las dos cancillerías para que encuentren un mecanismo de facilitación de diálogo”, sostuvo el Canciller ecuatoriano.

Falconi se refirió a los once puntos establecidos en la reunión de cancilleres en New York, semanas atrás, y destacó que el proceso de normalización de relaciones diplomáticas está en marcha, y por lo cual ambas cancillerías nombraron sus encargados de negocios para facilitar los mecanismos de relación bilateral.

Además, entre los once puntos se establecen principios, tales como que Ecuador reitera la independencia de las funciones del Estado ante el desconocimiento, por parte de Colombia, de la extrajudicialidad ecuatoriana, concluyó la nota de la prensa presidencial ecuatoriana.

Mientras tanto, un gran despliegue recibió en Ecuador la información entregada por el gobierno colombiano, según la cual las Farc planean atentar contra el juez de Sucumbios, Daniel Méndez Torres que inició el proceso para enjuiciar al ex ministro de defensa Juan Manuel Santos por el bonbardeo al campamento de Raul Reyes.

Sin embargo, hasta el momento el gobierno ecuatoriano no ha emitido un pronunciamiento sobre el particular

El plan fue detectado por información de inteligencia y buscaría «involucrar a las autoridades colombianas», para «perturbar el proceso de normalización diplomática» bilateral, según lo afirmo el Ministerio de Defensa de Colombia.