Ingrid Betancourt, quien durante seis años fue rehén de las Farc , se mostró favorable a los intentos de rescate militar de los secuestrados, como ocurrió en su caso.

«Cuando uno está en las manos de las Farc, uno quiere un rescate militar. Éste (el 31 de diciembre) es el momento más difícil del año. Cuando se mira hacia adelante y no ve sino esa nebulosa de años, uno desea que se defina esa situación, que haya un rescate y se logre la libertad o uno se muera», dijo.

«Como (ex) prisionera, estoy de acuerdo con el presidente (Alvaro Uribe). Hay que hacer todos los intentos para que los muchachos vuelvan a casa», agregó Betancourt en entrevista con la emisora Caracol.

El presidente Alvaro Uribe felicitó posteriormente a Betancourt por sus declaraciones, que calificó de «valerosas».

«Los narcoterroristas de las FARC nos estafan, pues el gobierno y los colombianos hemos dado todas las garantías para que liberen a los secuestrados y ellos niegan las más mínimas garantías al pueblo colombiano», dijo el mandatario.

Betancourt, quien fue secuestrada en 2002 cuando era candidata a la presidencia de Colombia por el partido Verde Oxígeno, fue rescatada en julio de 2008 en la operación militar «Jaque» en la que también fueron liberados tres estadounidenses y once militares. Desde entonces vive en Francia.

La ex rehén de las FARC señaló, sin embargo, que los familiares de los secuestrados rechazan la propuesta de un rescate militar por los riesgos que implica, pero apuntó que «en la selva, la vida siempre está en peligro».

En sus declaraciones, Betancourt llamó a los comandantes guerrilleros a «rectificar y reflexionar».

«Las liberaciones son para ellos (los altos mandos de las FARC) las cartas mayores que tienen que jugar y por eso pienso que las liberaciones se van a dar», dijo.

Colombia está a la espera de la liberación del cabo Pablo Emilio Mocayo y el soldado Livio Calvo, ofrecida por las FARC en abril pasado.

Las FARC solicitaron recientemente del gobierno un «protocolo de seguridad» para llevar a cabo esas liberaciones, pero Uribe respondió que ya ha dado todas las garantías necesarias y pidió a las fuerzas militares procurar el rescate de todos los rehenes.

Las FARC mantienen cautivos a 24 policías y militares, que pretenden intercambiar por unos 500 guerrilleros presos.