El secretario de la Conferencia Episcopal, Juan Vicente Córdoba, pidió en las ultimas horas que se agilice el proceso para la liberación de Josue Calvo y Pablo E. Moncayo, quienes se encuentran cautivos por las Farc junto a 24 militares y policias.
El prelado admitió que la muerte en cautiverio del gobernador del Caquetá, Luis Francisco Cuéllar, ha impedido avanzar en esa dirección.
Cuéllar, de 69 años, fue secuestrado por un comando de las FARC el 22 de diciembre pasado en su casa de la sureña ciudad de Florencia y su cuerpo hallado degollado horas después.
Como respuesta a la retención del político, el presidente colombiano Alvaro Uribe ordenó su rescate militar y el de los demás rehenes, en una de las mayores ofensivas contra ese grupo insurgente.
Córdoba reconoció que las acciones que desarrolla el Ejército en el área «han demorado» la liberación de los militares Pablo Moncayo y Josué Calvo, prevista para enero de 2010.
Las FARC prometieron en abril pasado la entrega de Moncayo, en su poder desde 1997, y en junio la de Calvo, como gesto hacia un canje de secuestrados por rebeldes en prisión.
El prelado colombiano pidió a los familiares de los dos rehenes tener «confianza» en que las liberaciones se darán en un mes, como lo anunció la senadora Piedad Córdoba.
La Iglesia católica colombiana trabaja junto con la Cruz Roja y la legisladora opositora en la parte logística de la operación humanitaria que traerá a la libertad a dos de los 24 militares en cautiverio.
Las FARC exigen al gobierno cumplir con los protocolos de seguridad para entregar a los dos rehenes, mientras el Ejecutivo afirma que ya dio todas las garantías y que persistirá en su rescate armado.