El contralor de Bogotá, Miguel Ángel Moralesrussi, pidió a Unidad
Administrativa Especial de Servicios Públicos (UAESP, reducir en por lo menos 12.94 por ciento la tarifa del servicio de aseo en la ciudad, como consecuencia de los mayores cobros realizados en la tarifa actual, además del porcentaje derivado de la eficiencia en la producción de biogás.
La solicitud la hizo luego de realizar una auditoría en la UAESP, en la cual estableció algunos hechos que no se ajustan plenamente a los criterios del Régimen Tarifario para los servicios públicos domiciliarios, que afectan de manera significativa a los usuarios.
En su misiva, el Contralor señala que no son claras las razones por las cuales la UAESP, en el año 2001, solicitó que se incrementara el Costo de Recolección y de Transporte (CRT), cuando el proceso de “competencia por el mercado” había permitido conseguir unos costos de eficiencia menores.
En este sentido, las tarifas del servicio de aseo en la ciudad deberían ser menores a los precios de techo establecidos por el Regulador para el resto de prestadores del servicio del país.
Advierte que el incremento del servicio de aseo en Bogotá ha permitido que las tarifas sean superiores a los costos reales que demandan los factores productivos que intervienen en la prestación del servicio, generando grandes y continuos excedentes en la bolsa general del esquema de aseo.
Es por esta razón, que en concepto de la Contraloría de Bogotá, dicha bolsa general después de haber retribuido completamente a todos los concesionarios y centros de costos, mantiene excedentes, que a junio de 2009 ascendían a $60.850 millones, situación que se debe a que los pagos que hacen los usuarios son mayores a la remuneración que reciben los prestadores del servicio.
Para la Contraloría de Bogotá no era necesario que en el 2001 la UESP solicitara a la CRA la modificación de oficio del CRT, por el contrario se puede inferir que si se hubiera aplicado la Resolución 151 de 2001 desde el inicio de la concesión, habría sido suficiente para sufragar todos los costos del servicio.
De esta manera, es posible establecer que las tarifas de aseo cobradas en Bogotá, a junio de 2009, son superiores en 5,47% a las generales aplicadas con base en dicha Resolución.
Adicionalmente, se pudo determinar que con recursos de la bolsa general del esquema de aseo, la UAESP financia continuamente actividades que le corresponde hacerlo a través de su presupuesto.
Teniendo en cuenta que estos hechos pueden generar presuntas faltas fiscales, disciplinarias y penales, el organismo fiscalizador ha ordenado el inicio de una indagación preliminar que permita esclarecer la gestión fiscal con cargo a los recursos de la bolsa general destinados a fines diferentes a los expresamente autorizados por la norma, que ascienden aproximadamente a $26.822 millones.
De acuerdo con lo anterior, los excedentes acumulados de la bolsa, a junio de 2009, reportados por la UAESP, ascienden a $60.850, los cuales deberían ser de $87.673 millones, si no se hubiesen financiado otras actividades.
Los excedentes de la bolsa general son un referente real para cuantificar la posible reducción tarifaria a favor de los usuarios; en este sentido, las nuevas tarifas podrían disminuir en por lo menos un 12.94%.
La Contraloría de Bogotá considera que adicional a esto, tanto la CRA como la UAESP deberían considerar las eficiencias generadas al interior del servicio ordinario de aseo en la ciudad, para trasladarlas vía tarifaria a los usuarios.
Es el caso de los ingresos que se generarán a partir del 2010 por certificados de reducción de emisiones producto de la explotación de biogás, en cuantía aproximada de $6.000 millones anuales, los cuales se incrementarán en la medida que se logre sobrepasar los niveles preestablecidos.
En este sentido, el contralor Moralesrussi llama la atención de la administración distrital para que evalúe la pertinencia de adoptar las medidas tendientes a garantizar que dentro de la nueva estructura para el servicio público domiciliario de residuos ordinarios, que debe adoptar la UAESP con base en lo definido por la CRA, se incorporen las correcciones a las irregularidades señaladas con el fin de beneficiar a los usuarios.
De esta manera, los nuevos procesos licitatorios que deben surtirse en la vigencia 2010 requieren de una acción integral que permita incorporar por parte de la UAESP, la exigencia de mayores niveles de eficiencia para los oferentes, permitiendo que los valores ofertados por los ganadores de cada licitación sean inferiores a los máximos establecidos, situación que posteriormente permite establecer unas tarifas para el servicio de aseo inferiores a las máximas calculadas inicialmente.
Dentro de este contexto, el Contralor de Bogotá hizo énfasis en que se adopten oportunamente las medidas que eviten que por falta de planeación y gestión administrativa de la UAESP se obvie o dilate dar inicio al proceso licitatorio requerido para adjudicar de manera definitiva la concesión que administra, opera y da mantenimiento al Relleno Sanitario de Doña Juana.
“No sería concebible que el Distrito mantuviera la costumbre vivida por el contrato de Proactiva S.A. ESP, de prorrogar el convenio interadministrativo suscrito el pasado 2 de octubre de 2009 con la Empresa Aguas de Bogotá S.A. ESP, pues por esta vía se desconoce de plano acudir a la licitación pública”, afirmó el
contralor Moralesrussi.
Finalmente, el jefe del organismo de control reiteró la importancia de blindar los procesos licitatorios para asegurar la libre competencia, la objetividad, la transparencia y la imparcialidad, y manifestó que el ente fiscalizador seguirá manteniendo una línea especial de vigilancia sobre estos procesos que adelanta la UAESP.