Al menos 18 personas murieron y otras 80 resultaron heridas en un atentado suicida cometido con un autobús-bomba contra una comisaría de la Policía en Bagdad, informaron fuentes policiales.

Un suicida al volante se empotró contra la comisaría donde detonó los explosivos que cargaba el vehículo de transporte de pasajeros, explicaron las fuentes.

El atentado ocurrió en la mañana del martes en la plaza de Tahariyat, en el centro de la capital iraquí, donde estaba ubicada la comisaría, que se derrumbó por completo como consecuencia de la explosión.

Entre los muertos hay al menos 5 agentes, precisaron las fuentes, las cuales subrayaron que los equipos de rescate continuaban hasta este medio día buscando víctimas bajo los escombros.

Asimismo, varios vehículos y edificios cercanos se han visto afectados por la conflagración.

Este atentado se produce un día después de una cadena de ataques similares perpetrados por suicidas que conducían carros-bomba contra varios hoteles de Bagdad que acabó con la vida de 36 personas.

Estos atentados coincidieron con el anuncio de la ejecución de Alí Hasan al Mayid, conocido como “Alí el Químico”, primo del difunto dictador Sadam Husein, y sobre quien pendían cuatro condenas de muerte.

Por otro lado, varios políticos han advertido de la posibilidad de un aumento de los atentados terroristas según se aproximen las elecciones parlamentarias, previstas para el próximo 7 de marzo.