Durante lo corrido del año, 18.503 hectáreas de cultivos ilegales han sido destruidas, 650 bajo la modalidad de erradicación manual y 17.853 mediante aspersión.

Hasta la fecha, 89 laboratorios, dos cocinas y tres cristalizaderos para la producción de estupefacientes, se han ubicado por tropas del Ejército Nacional. Además, los efectivos militares han decomisado más de 70.000 galones de carburantes.

Entre tanto, los efectivos militares de las diferentes unidades desplegadas en el territorio nacional, se han incautado de dos toneladas de pasta base de coca, 16 toneladas de hoja de coca, una tonelada de marihuana y casi 750.000 semilleros. Así mismo, 39.787 galones de insumos líquidos y 33.247 kilos de precursores sólidos han sido destruidos.