Internacional

Justicia haitíana liberará a misioneros sindicados de secuestro de niños

Un juez de Haití decidió liberar a 10 misioneros estadounidenses acusados de secuestrar a 33 niños e intentar sacarlos del país, que fue devastado por un terremoto, dijo el miércoles una fuente judicial.

La fuente sostuvo que los misioneros, quienes han estado en prisión desde que fueron detenidos en la frontera de Haití con República Dominicana el 29 de enero, podrían ser puestos en libertad el jueves.

“La orden será liberarlos”, dijo a Reuters la fuente, quien pidió no ser identificado. La decisión aún no ha sido dada a conocer al público.

“Algo que un juez de investigación busca en una pesquisa criminal es la intención criminal de parte de las personas involucradas y no hay nada que muestre esa intención criminal de parte de los estadounidenses”, afirmó la fuente.

Los misioneros, que en su mayoría pertenecen a una iglesia bautista con base en Idaho, fueron arrestados cuando intentaban cruzar la frontera a República Dominicana junto a los niños, 17 días después de que un terremoto de magnitud 7 dejó más de 200.000 personas muertas en la empobrecida nación caribeña.

Los cinco hombres y cinco mujeres han negado cualquier ilícito intencional y dijeron que sólo intentaban ayudar a huérfanos que quedaron desamparados por el terremoto, que destruyó la capital de Haití y dejó más de un millón de personas sin techo.

Posteriormente se conoció evidencia que demuestra que la mayoría de los niños aún tiene a sus padres vivos.

Como parte de los requisitos legales de Haití, el juez Bernard Sainvil debe enviar una notificación de su decisión al fiscal. Eso se hará el jueves, dijo la fuente.

PADRES PIDEN LA LIBERACION

Una vez que reciba la orden, el fiscal podría ofrecer una opinión sobre si uno o más estadounidenses deberían permanecer detenidos, pero eso no tendría efecto legal sobre la decisión del juez, afirmó la fuente.

Durante las audiencias del caso, Sainvil escuchó a 10 padres de los niños que fueron entregados a los estadounidenses. Ellos dijeron que debieron entregar a sus hijos porque no tenían casa o agua para darles y creían que tendrían una mejor vida en otra parte.

“Todos ellos pidieron la liberación de los estadounidenses”, dijo la fuente.

El caso ha sido una distracción para el Gobierno haitiano mientras intenta lidiar con las consecuencias del terremoto y es un tema diplomático delicado para Estados Unidos, que lidera el enorme esfuerzo de ayuda internacional para alimentar y dar refugio a los sobrevivientes del sismo.

El Gobierno de Estados Unidos ha dicho que está brindado acceso consular a los estadounidenses y que está observando el caso, pero aclaró que no quiere interferir.

“Obaviamente este es un tema del sistema judicial haitiano”, dijo el sábado la Secretaria de Estado Hillary Clinton a periodistsa en Washington.

El Gobierno de Haití había advertido que traficantes inescrupulosos podrían intentar sacar provecho del caos que siguió al terremoto y llevarse a niños vulnerables, por lo que volvió más rigurosos los procedimientos de adopción.