El delegado del Comité Internacional de la Cruz Roja -CICR, Christophe Beney, expresó en las últimas horas su optimismo de dentro de poco se logren las liberaciones del Pablo E. Moncayo Y Daniel Josue Calvo, quienes se encuentran secuestrados por las Farc.

Beney se reunió hoy con el ministro de Defensa, Gabriel Silva, el comandante de las fuerzas militares, general Freddy Padilla y el Comisionado para la Paz, Frank Pearl, para discutir los protocolos de seguridad para que el ICR recoja a los dos militares, cuyas liberaciones fueron anunciadas por las FARC en abril y junio de 2009.

“Podemos estar objetivamente optimistas de que todos los detalles para tal operación (de liberación) se arreglen para que la operación se dé en los próximos días o semanas, sin hablar de fechas obviamente” definitivas, dijo Beney a reporteros tras el encuentro,

Ratificó que Brasil “una vez más nos está brindando el apoyo logístico de la misma manera que el año pasado” que facilitó dos helicópteros militares y sus tripulaciones para recoger en un lugar de la selva colombiana a cinco liberados.

Silva señaló que acordaron que un anuncio con 48 horas de anticipación es “tiempo suficiente” para ordenar la suspensión de operaciones en el área en que se produzca la entrega de los dos militares.

Las FARC anunciaron en abril del 2009 que entregarían al cabo del ejército Pablo Emilio Moncayo, capturado por los rebeldes en diciembre de 1997. A fines de junio pasado, las FARC dijeron en otro pronunciamiento que liberarían al soldado Josué Daniel Calvo Núñez, retenido desde abril del 2009.

En liberaciones realizadas en 2008 y a comienzos del 2009 generalmente transcurrió poco más de un mes entre el anuncio rebelde y la entrega del rehén a delegados del CICR y a la senadora Piedad Córdoba, quien es quien recibe de forma confidencial de los insurgentes las coordenadas del lugar donde un secuestrado es liberado.

Pero las entregas de Moncayo y Calvo, dos de al menos una veintena de militares y policías retenidos por las FARC, se han empantanado en medio de mutuas recriminaciones del gobierno y la guerrilla por los retrasos.