“Estamos en la revisión del protocolo de seguridad. Esperamos tener otra reunión de trabajo, ojalá mañana (hoy) y a partir de ahí lo único que faltaría sería la información de las FARC para que en 48 horas se pudiera comenzar el operativo”, indicó en las últimas horas el comisionado para la Paz, Frank Pearl.
El funcionario explicó que ese lapso de tiempo es el requerido “para traer los helicópteros y hacer la logística” de buscar en el lugar señalado por la guerrilla al sargento del Ejército Pablo Moncayo, cautivo desde hace 12 años, y al soldado Josué Daniel Calvo.
Estas liberaciones fueron ofrecidas por las FARC desde abril del año pasado.
En sus declaraciones, Pearl agradeció al Gobierno de Brasil “toda la disposición” mostrada en este caso y subrayó que su papel en anteriores procesos de liberación de rehenes de las FARC fue “absolutamente impecable y dejó a todo el mundo tranquilo”.
La liberación de estos dos rehenes, y la entrega de los restos del mayor Julián Guevara, fallecido en cautiverio, será garantizada por la senadora opositora Piedad Córdoba, el Comité Internacional de la Cruz Roja y la Iglesia católica.
Las FARC, la guerrilla más antigua de Colombia, con 45 años de lucha armada, mantienen en su poder a 24 militares y policías, que plantean intercambiar por 500 rebeldes presos por el Gobierno.