Una señal que dice «No Pasar» advertía a cuatro adolescentes en Florida que no caminaran sobre un puente ferroviario en el que estuvieron bromeando y tomando fotografías. Un pescador que estaba en la orilla del arroyo bajo el puente también les advirtió que tuvieran cuidado.
La advertencia final fue el ulular del silbato de un tren que se aproximaba. Los adolescentes, tres mujeres y un hombre, intentaron atender esa señal de alarma, pero sólo el joven logró correr suficientemente rápido para salvarse.
Las tres muchachas fueron alcanzadas por el tren el sábado, dijeron la policía y testigos.
Espectadores les gritaron que corrieran o se lanzaran al arroyo Cane, seis metros abajo del puente, pero únicamente el muchacho puso recorrer los casi 61 metros (200 pies) que lo pusieron a salvo.
Los adolescentes habían estado paseando en el centro de Melbourne _conocido por sus tiendas y centros nocturnos_ cuando decidieron cruzar el puente aproximadamente a las 6:30 p.m., señaló el teniente Curtis Barger. Sus padres los habían dejado en un centro comercial, y ellos tomaron después un autobús hacia el centro donde «sólo estuvieron bobeando», agregó, sin dar detalles.
Bruce Dumas, de 53 años, estaba pescando bajo el puente cuando vio a los adolescentes caminar sobre el puente. Les advirtió que tuvieran cuidado, pero comentó que no le hicieron mucho caso.
«Ya sabe como son los chicos», dijo Dumas. «Probablemente querían fotografías de ellos en las vías», agregó.
Dumas señaló que escuchó el silbato del tren, después un sonido de frenos. Tras el impacto escuchó a una muchacha gritando y llorando.
«Pienso que el tren las alcanzó tan rápido que se congelaron y no supieron qué hacer», indicó Dumas.
Las adolescentes pudieron haber saltado hacia un puente viejo y oxidado junto al que estaban, aunque no está claro por qué no lo hicieron.
Otro pescador, Charlie Foust, les gritó que saltaran al agua.
«Cuando escucharon el tren comenzaron a correr hacia el otro lado», dijo Foust a Florida Today. «Es triste. Eran apenas unos niños. Probablemente se asustaron y no supieron qué hacer», agregó.
Barger dijo que todos los adolescentes eran del área, y agregó que sus identidades quizá serían reveladas hasta el lunes.
Ralph Smith dijo que una de las adolescentes muertas era su sobrina Jennifer Reichert, quien tenía 15 años asistía a la Escuela de educación Media Southwest en Palm Bay. Smith no quiso hacer más comentarios.
El domingo había poca evidencia de la tragedia.