Los padres de los cuatro estudiantes mexicanos muertos y de una joven herida durante el ataque colombiano al campamento donde se alojaba el cabecilla de las Farc, Raúl Reyes, recibieron el martes la solidaridad y condolencias del presidente ecuatoriano Rafael Correa por sus pérdidas.

“El presidente fue muy amable, hablamos sobre trabajar juntos por la justicia, porque tanto Ecuador como los mexicanos fuimos agraviados por los ataques colombianos hace ya casi dos años”, dijo a la AP Jorge Morett, padre de Lucía Morett, una universitaria que sobrevivió al ataque el 1 de marzo de 2008 en territorio ecuatoriano.

El encuentro se realizó en Playa del Carmen, al sur del balneario mexicano de Cancún, a escasos siete días del segundo aniversario del ataque al campamento de las FARC en territorio ecuatoriano y en el que murieron en total 25 personas, entre ellas Raúl Reyes, uno de los siete jefes de la guerrilla colombiana.

Morett y dos colombianas fueron las únicas sobrevivientes de la incursión colombiana.

Tras regresar a México luego de permanecer asilada en Nicaragua, Morett se enteró que la justicia ecuatoriana la pedía en extradición por supuestamente atentar contra la seguridad de su país.

Correa les dijo a los padres que la decisión del Poder Judicial fue autónoma, pero que él consideraba a su hija como víctima, comentó Morett.

El mandatario ecuatoriano dijo el lunes en rueda de prensa que si hubiera sido por él, “jamás hubiera seguido un proceso judicial contra Lucía Morett. De hecho creo que ella fue víctima, no victimaria”.

Al encuentro, realizado al margen de la llamada Cumbre de la Unidad de América Latina y el Caribe, también asistieron los padres de los jóvenes fallecidos Verónica Velázquez Ramírez, Juan González del Castillo, Fernando Franco Delgado y Soren Ulises Avilés Angeles.

Los familiares aprovecharon su visita a la ciudad de la cumbre para protestar por la visita del presidente colombiano Alvaro Uribe, a quien responsabilizan directamente de la muerte de sus hijos.

“Estamos haciendo un informe para presentarlo ante tribunales internacionales para demandar al presidente Uribe, porque él es el principal responsable de la muerte de mi hijo. El mintió desde el principio”, dijo Alvaro Gonzalez, padre de Juan.

Los padres acudieron hasta el hotel donde se encontraba la prensa que cubría la cumbre para realizar su protesta, en la que alzaron carteles con la leyenda “Alvaro Uribe Velez. Se busca por narcotraficante, paramilitar y asesino” e imágenes de sus hijos.

Uribe acusó después del ataque a los jóvenes de tener vínculos con las FARC, algo que siempre han negado sus familiares.