Una persona muerta y nueve más heridas dejó un ataque de abejas africanizadas en Santa Rosa de Cabal, Risaralda, cuando participaban en labores del campo.
Las víctimas entre adultos y jóvenes sembraban árboles frutales en un terreno a orillas del río San Eugenio, a cuyas aguas tuvieron que lanzarse como una forma de escapar de los furiosos insectos. Todos fueron trasladados a hospitales y clínicas de Santa Rosa de Cabal y Dos Quebradas, donde murió un adulto mayor.
Las abejas africanizadas, generalmente llamadas abejas asesinas, son híbridos procedentes del cruzamiento de la subespecie natural africana Apis mellifera scutellata con abejas criollas del continente sudamericano. Su particularidad es su acentuado comportamiento defensivo y son muy agresivas cuando se las molesta.
Estos insectos atacan en cantidad, muy velozmente y siguen a su víctima hasta a 900 metros de su colmena o enjambre. Este comportamiento ha provocado en América numerosas muertes de personas, incrementándose anualmente el número registrado de víctimas. En Colombia sus víctimas suman más de cien.