El Presidente Álvaro Uribe Vélez reiteró hoy el respaldo del gobierno nacional a la construcción del Metro de Bogotá, pero exigió garantías de que la operación del nuevo sistema de transporte masivo será autosostenible financieramente.

El primer mandatario dijo que aunque no se puede pretender que el Estado recupere la inversión en el moderno sistema de transporte masivo, la situación de Colombia sí exige que haya una garantía de que el metro pague su operación con sus propias tarifas.

El presidente Uribe advirtio que “lo que no puede hacer el Estado es pagar la construcción del Metro y enseguida subsidiar tarifas”.

El primer mandatario reiteró el compromiso del Gobierno Nacional para la implementación del Sistema Integrado de Transporte Público para la capital, que además del Metro incluye el desarrollo del Transmilenio y del Tren de Cercanías.

Explicó que en el proceso de estudio del Metro, el Distrito cuenta con un grupo de consultores que han indicado cuál debe ser la primera línea a la que se le debe dar prioridad; al mismo tiempo, el Gobierno, representado por el Departamento Nacional de Planeación, tiene un grupo de validadores que estudian la viabilidad de la propuesta.

El Presidente Uribe señaló que en este momento existen algunas discrepancias sobre cuál debe ser la primera línea del Metro y sobre la sostenibilidad de gastos que este tendrá cuando entre en funcionamiento.

De igual manera, el Mandatario destacó el progreso que ha tenido Bogotá en el desarrollo del Sistema de Transporte. Resaltó que al inicio de este Gobierno Bogotá tenía 34 kilómetros de Transmilenio, hoy cuenta con 84 kilómetros y se están construyendo 20 más.

Por ello recalcó que la posición del Gobierno Nacional es que “el Transmilenio, el Metro y el Tren de Cercanías no son excluyentes, deben ser convergentes”, para que se conviertan en una solución a las necesidades de movilidad que actualmente presenta la capital.

“La verdad es que nosotros reiteramos todo el compromiso de apoyar a Bogotá”, añadió el Jefe de Estado.

Frente a las 72 horas del paro de transporte que se presentó en Bogotá, el Presidente concluyó que el propósito del Gobierno es apoyar a los mandatarios locales y departamentales, independientemente de su origen político, pues ello garantiza la unidad de Patria y crea mejores condiciones de gobernabilidad en el país.