Un sismo fuerte con magnitud preliminar de 6,0 sacudió el lunes el este de Turquía matando al menos 57 personas y derribando casas en al menos seis villas pequeñas, dijo un funcionario.
El alcalde Bekir Yanilmaz, del cercano poblado de Kovancilar, dio la cifra de muertos a la televisora CNN-Turca y señaló que las víctimas eran de las villas de Okcular, Yukari Kanatli y Kayali, donde el sismo derribó casas de piedra o de ladrillos de adobe y torres de mezquitas. El centro gubernamental de atención de crisis dio una cifra de 51.
El área más dañada fue la villa de Okcular, donde se reportó la muerte de al menos 17 personas. Otras 13 personas murieron en la villa de Yukari Demirci, dijo el gobernador Muammer Erol.
El centro gubernamental de atención de crisis dijo que había aproximadamente 100 heridos por el terremoto ocurrido a las 4:32 a.m. (0232 GMT) en la provincia de Elazig, sorprendiendo a mucha gente dormida.
La televisora CNN-Turca reportó que entre los muertos había cuatro hermanas pequeñas atrapadas en los escombros.
«Todo fue derribado, no hay piedra en su lugar», comentó Yadin Apaydin, administrador de la villa de Yukari Kanatli, donde señaló que fallecieron tres residentes.
Las autoridades bloquearon el acceso a la villa de Okcular, donde ocurrieron la mayoría de muertes, para facilitar la entrada y salida de ambulancias y equipos de rescate a los caminos estrechos de la aldea. Familiares se apresuraban a llegar a la villa para tener noticias sobre sus seres queridos.
«La villa está totalmente aplastada», dijo a la televisora NTV Hasan Demirdag, administrador de Okcular.
Ali Riza Ferhat, un residente de Okcular, comentó que lo despertó el sacudimiento.
«Traté de salir, pero la puerta no se abría. Salí por la ventana y comencé a ayudar a mis vecinos», dijo a NTV. «Sacamos seis cadáveres», agregó.
El movimiento telúrico, con magnitud preliminar de 6,0, ocurrió a las 4:32 a.m. (0232 GMT) del lunes con epicentro cerca de la villa de Basyurt, dijo el centro sismológico de Kandilli, con sede en Estambul. A esté le siguieron cerca de 30 réplicas, la más fuerte de ellas con magnitud 5,5, agregó.
El sismo fue sentido en las vecinas provincias de Tunceli, Bingol y Diyarbakir, donde los residentes salieron aterrorizados a las calles y pasaron allí la noche.
Algunas de las lesiones ocurrieron debido al pánico, ya que la gente saltó desde ventanas o balcones. Grabaciones de la agencia de noticias privada Dogan mostraban gente llevando heridos a hospitales en automóviles y taxis.
Mustafa Erdik, director del Observatorio Kandilli, pidió a los residentes que no regresaran a sus casas dañadas, advirtiéndoles que podrían caer con las réplicas, las cuales podrían durar días.
Imágenes de televisión mostraban rescatistas y soldados en Okcular levantando escombros ante la mirada de aldeanos.
Se podía ver a rescatistas excavando y después sacando a un anciano. El hombre estaba muerto y cubrieron rápidamente su cuerpo con una sábana.
Dos mujeres estaban sentadas sobre colchones envueltos con sábanas. El sismo también derribó establos, matando animales de granja.
La organización Media Luna Roja (equivalente a la Cruz Roja occidental) comenzó a establecer tiendas de campaña en la región.
Elazig está aproximadamente 550 kilómetros (340 millas) al este de Ankara, capital del país.
Los sismos son frecuentes en Turquía, ya que gran parte del país yace sobre la falla Anatolia Norte.
En 1999, dos terremotos fuertes sacudieron el noroeste de Turquía matando a cerca de 18.000 personas.
En el 2007, un terremoto con magnitud 5,7 dañó edificios en Elazig, atrapando por poco tiempo a una mujer bajo escombros. En el 2003, un terremoto de 6,4 derribó el dormitorio de una escuela en la vecina provincia de Bingol, matando a 83 niños. El colapso fue atribuido a una mala construcción.