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Por sequía, en mayo se podría detener la hidroelectrica más grande de Venezuela

La represa Guri, que genera más de la mitad de la electricidad de Venezuela, podría perder buena parte de su capacidad a mediados de mayo si siguen sin llegar las lluvias al país petrolero, dijo el jueves el jefe de la eléctrica estatal Edelca.

La situación sería crítica para el Gobierno del presidente Hugo Chávez, que ya ha se ha visto obligado a tomar impopulares medidas de ahorro a pocos meses de las elecciones legislativas, como racionamientos de luz y agua y amenazas de corte del suministro a comercios e industrias que no bajen el consumo.

“Es posible que si continúa la extrema sequía, podríamos alcanzar el punto crítico a mediados del mes de mayo”, dijo en la noche del jueves Igor Gavidia, presidente de Edelca, a la televisión estatal.

Esto significa que el Guri, unas de las mayores represas hidroeléctricas del mundo con capacidad para generar más de 10 gigavatios (gw), tendría que reducir su generación en al menos la mitad debido a que no habría suficiente agua para mover algunas turbinas.

La crisis eléctrica es uno de los mayores desafíos para Chávez en años, ya que además de ser un duro obstáculo para levantar la economía del país sudamericano, que el año pasado se contrajo un 3,3 por ciento, supone una verdadera amenaza para su debilitada popularidad.

Si el Gobierno necesita ampliar el racionamiento antes de septiembre, el chavismo vería reducidas sus posibilidades de revalidar la abrumadora mayoría que mantienen en la Asamblea Nacional desde el 2005 y que ha permitido a Chávez tener amplio margen para modificar la legislación.

El viceministro de electricidad, Javier Alvarado, dijo que el Gobierno incluso estudia la posibilidad de implantar un día de parada en el sector público para reducir el consumo, luego de que el plan de ahorro lanzado por el Ejecutivo no haya sido suficiente hasta el momento.

El mandatario socialista asegura que aún sin lluvias, Guri podría seguir operando hasta junio, pese a que analistas advierten que la situación podría tonarse complicada antes.

Actualmente, el embalse está a un tercio de su capacidad y faltan 13 metros para entrar en la zona de peligro, mientras la sequía evapora el reservorio a un ritmo de 15 centímetros diarios.

Sin embargo, Gavidia dijo que es improbable que llegue lo que la oposición ha calificado del “gran apagón”, ya que la temporada de lluvias usualmente comienza en mayo recuperando los niveles de los embalses, mientras que el Gobierno avanza con su plan de incorporar nueva capacidad térmica.

“No creemos que vaya a haber un caos”, dijo Gavidia. “Creemos que esa es una posibilidad remota”, agregó.