Dos hermanos colombianos, uno de ellos funcionario de la sede diplomática de su país en Chile, fueron condenados junto a dos chilenos a 5 años de cárcel por el tráfico de 491 kilos de cocaína.
En sentencia definitiva la sala penal de la Corte Suprema condenó a Constanza Botero Londoño y a su hermano Alberto, quien era funcionario de la sede diplomática, así como a la esposa chilena de éste, María Eugenia Delgado. La resolución anuló otra condena que pesaba, además, sobre el grupo, por otros 5 años por asociación ilícita.
También como autor del delito de tráfico de estupefacientes fue condenado a 5 años José Lasen Alavi. Como cómplices del mismo delito y a tres años de reclusión fueron condenados Claudio Gutiérrez y Luis Jarami. Todos ellos chilenos.
Según la sentencia judicial, el grupo se concertó en 1996 para importar desde Colombia la cocaína, que fue introducida al país en equipos de esterilización médica denominados antoclaves.