Pastores musulmanes de la etnia fulani mataron el miércoles a por lo menos trece pobladores de una aldea cristiana en el centro de Nigeria, en un nuevo episodio de los enfrentamientos religiosos que ya dejaron centenares de muertos en este país de Africa occidental.
La matanza se produjo a eso de la 01H30 de la madrugada (00H30 GMT) en la localidad de Byei, en las afueras de Riyom, 15 km al sur de Jos, una zona mayoritariamente poblada por la etnia cristiana de los berom, en el Estado del Plateau. Los atacantes, según los informes, estaban disfrazados de militares.
“Puedo confirmar que trece personas murieron y que seis fueron gravemente heridas”, indicó el jefe de informaciones del Estado del Plateau, Gregory Yenlong.
Yenlong llamó a los habitantes a la calma y a abstenerse de venganzas. “El gobierno hará cuanto esté a su alcance para que los atacantes comparezcan ante la justicia”, prometió.
Un periodista de una radio local refirió que había 12 cadáveres, entre ellos los de varios mujeres y niños, alineados en la calle.
“Los cadáveres están carbonizados parcialmente y tienen marcas de machetazos. He contado seis casas incendiadas, y la gente a mi alrededor llora y gime”, reportó.
Pastores fulani atacaron el pasado 7 de marzo tres aldeas mayoritariamente cristianas cerca de Jos, matando a 109 personas, en su mayoría mujeres y niños, según la policía.
Otras fuentes afirman que en esos ataques murieron de 100 a 500 aldeanos. La Cruz Roja dio parte de 8.000 personas obligadas a huir de sus aldeas.
La policía anunció que 49 implicados en esa masacre fueron detenidos y que muchos alegaron haber actuado en “represalias” por ataques perpetrados por los borom.
Los enfrentamientos en esa región, donde se tocan las zonas musulmanas del norte con las cristianas y animistas del sur, provocaron miles de muertos desde 2001 en este país de 150 millones de habitantes.
Según los lugareños, las matanzas entre los pastores fulani y los agricultores berom suelen deberse a robos de ganado más que a diferendos religiosos.