Colombia tiene las condiciones para crecer más y aprovechar los buenos vientos de los países emergentes, así lo concluyó la economista jefe de BBVA Colombia, Juana Téllez, al término de su intervención en el foro BBVA “Lo imposible es posible” que se realizó en Bogotá.
De acuerdo con Téllez, superar la crisis con éxito le permitió a Colombia entrar en una senda de desarrollo sostenible para los próximos años. “Hoy el país cuenta con unos fundamentales mejores que los registrados en tiempos difíciles: cuenta con una inflación baja y estable, así como, con una tasa de cambio flexible y un déficit fiscal”, anotó Téllez.
La reciente desaceleración global permitió comprobar la fortaleza de la economía colombiana. Esta vez los fundamentales macroeconómicos posicionaron al país como uno de los pocos que logró crecer a pesar de la coyuntura internacional adversa de los años 2007-2009.
“El desempeño de la economía durante el primer semestre del año y la evolución reciente de los indicadores líderes anticipan un crecimiento en 2010 bastante superior a las expectativas iniciales y más cercano al potencial de largo plazo”, agregó la economista jefe de BBVA Colombia.
A juicio de Téllez, para potenciar el buen momento por el que atraviesa el país se deben potencializar factores como la sostenibilidad fiscal; la eficiencia tributaria; además de una mayor profundización de los mercados financieros; alcanzar las mejoras en infraestructura y consolidar los flujos de inversión.
En concepto de la economista jefe de BBVA Colombia, uno de los principales retos de la economía colombiana en los próximos años será la administración del flujo de divisas que atraerá la expansión del sector minero – energético.
“Las expectativas respecto a una mejora en los indicadores de déficit y deuda del Gobierno para los próximos años están atadas en buena parte a un auge en este sector y de los ingresos que recibirá la Nación por concepto de dividendos y recaudo tributario. Para lo cual son fundamentales, el proyecto de reforma fiscal que contempla la creación de un fondo soberano con recursos de la minería y la implementación de la regla fiscal, recientemente presentada ante el Congreso”, manifestó.
Según Téllez, estas iniciativas son claves para reducir las presiones hacia la apreciación cambiaria que surgirán del aumento en las ventas de petróleo y la inversión extranjera, fenómeno que podría profundizarse en caso que al país le sea otorgado el grado de inversión por lo cual se requiere estar preparado.
Las perspectivas de largo plazo de la economía son optimistas. “El reto para el país será fortalecer su comercio exterior con las economías referentes en Asia y Latinoamérica, y así profundizar el proceso de diversificación de las exportaciones. Igualmente, la pronta implementación de las reformas en materia laboral y fiscal y los avances en infraestructura durante los próximos años son cruciales con miras a potencializar el crecimiento de la economía”, puntualizó Téllez.