El comandante del Ejército, Alejandro Navas, dijo que en nombre de la institución pedirá perdón público por el crimen de Arauca en el que fueron asesinados los tres niños, a lo que se le sumó la confesión y captura del subteniente Raúl Muñoz por acceso carnal violento.

El militar dijo que aunque el hecho fue conducta reprochable de un individuo, ese mismo individuo era un miembro de las Fuerzas Militares, que es el título más elevado para un colombiano que ame a su Patria.

Por eso, argumentó, que le pedirá perdón en nombre de la institución, y lo hará porque además l causa dolor, pena y vergüenza que esto haya sucedido en contra de esos pequeños compatriotas que el Ejército debió proteger.

En entrevista con el diario El Tiempo, el general también admitió que aunque “el Ejército hace un esfuerzo grande de selección y educación de  los soldados, el proceso termina siendo imperfecto por estar en su eje fundamental el elemento humano. Suele pasar que un joven del promedio de la sociedad, con las características comunes de los hogares colombianos, lleve en su alma un potencial delincuencial, como pasa en todas las actividades y profesiones de la vida”.