Luego de encabezar un consejo extraordinario de seguridad en el que participaron un grupo de congresistas del departamento de Córdoba y los Altos Mandos Militares y de Policía, el Ministro Rodrigo Rivera dispuso algunas medidas orientadas a disminuir el delito de homicidio en Córdoba, que ha registrado un aumento del 11 por ciento en el periodo entre el 7 de agosto y el 15 de noviembre, comparado con el mismo lapso del año pasado.
Dentro de las medidas se encuentra un ajuste en el dispositivo de las Fuerzas Armadas para la región en frentes como el combate a las bandas criminales y el narcotráfico. Por ejemplo se ordenó reforzar la vigilancia y el control militar en las zonas costeras de la región.
Además en los próximos días se presentará al nuevo Comandante de Policía para que asuma el mando del Departamento.
El Ministro Rivera también se comprometió a viajar al departamento de Córdoba el próximo 27 de noviembre para hacer el lanzamiento del plan navidad y fin de año para el departamento.
En el consejo extraordinario de seguridad, realizado en Bogotá, participaron además del Ministro de Defensa los Representantes a la Cámara por Córdoba, Raymundo Méndez, Antonio Madrid, Fabio Raul Amin y David Barguil, así como el doctor Jaime Avendaño, director nacional del Plan Consolidación de Acción Social de la Presidencia de la República.
Durante la reunión, el Ministro Rivera resaltó que aunque en el departamento de Córdoba se ha registrado un aumento en el número de homicidios hay que destacar por otro lado la disminución en otros delitos que afectan la seguridad.
Según estadísticas de la Policía Nacional, en los primeros 100 días de gobierno el hurto a personas se redujo en 74 por ciento, las lesiones comunes disminuyeron 29 por ciento y la extorsión un 71 por ciento, comparado con el mismo periodo del año 2009.
En total los delitos que afectan la seguridad ciudadana (lesiones comunes, hurto y piratería) en Córdoba registraron una disminución del 60 por ciento desde el 7 de agosto a la fecha. Los delitos que afectan la seguridad vial (muertes y lesiones en accidentes de tránsito) bajaron en 28 por ciento, mientras que los delitos que afectan la seguridad democrática (homicidios, secuestro y acciones terroristas) tuvieron un aumento del 5 por ciento, debido básicamente al incremento en las muertes violentas.