Cinco años y dos meses después de su debut en la selección argentina, Lionel Messi es reconocido por la prensa de su país como el futbolista que, con la camiseta celeste y blanca, juega en el mismo nivel que en el Barcelona, el equipo con el que ha ganado todo.

El tanto que marcó en el minuto 91 frente a Brasil (0-1) en el partido amistoso disputado el miércoles en Qatar, con una jugada previa de alta calidad, rompió la sensación local de que éste Messi no era igual a aquél, el azulgrana que tiene rendido a sus pies al mundo futbolero.
“Con un golazo, Messi se cobró una cuenta pendiente”, anuncia este jueves el matutino La Nación.

“Todo se puede esperar de él. Hay que observarlo siempre, no se le debe quitar la mirada ni descuidar por tan sólo un segundo, porque ese es el tiempo suficiente que necesita para realzar su imagen, para despertar y convertirse en la figura”, comenta el rotativo.

“En un parpadeo ratificó que es el mejor futbolista del planeta, que las genialidades a las que nos fue acostumbrando con la camiseta del Barcelona no tienen límites y que también son posibles con los colores de Argentina. En un abrir y cerrar de ojos enseñó que no entiende de cansancios, de férreas defensas o de viajes agotadores”, añade.

“Messi, o mais grande”, titula el diario Clarín a doble página, y afirma que “la estrella” rosarina “apareció en su máxima dimensión, con una genialidad, cuando el partido terminaba” con el marcador cerrado.

“Demostró, y se demostró a sí mismo que, por más calidad que haya en el envase, si uno no le pone alma al cuerpo es complicado que las cosas salgan bien. Messi tuvo entonces una certeza inequívoca: el más grande es él”, comenta.

El diario deportivo Olé compara el gol de Messi con el que Claudio Caniggia marcó ante el mismo rival en los cuartos de final del Mundial de Italia’90, tras una jugada fenomenal de Diego Maradona, y señala que éste es “una versión amistosa de aquel”

“No será Alá, pero los miles de musulmanes que coparon el estadio Khalifa internacional lo veneraron como si, efectivamente, fuera su Dios supremo…”, añade el matutino.

Para el diario Página 12 “Fue el exorcismo en forma de gol” e indica que “el rosarino quebró cinco años de sequía ante los brasileños y de paso consiguió su primer triunfo en el clásico, con este golazo al que estuvo buscando durante todo el amistoso disputado en Doha, Qatar”.

Tras titular “Por fin una alegría”, el Diario Popular indica que “Messi frotó la lámpara (como si fuera Aladino) y le dió brillo al debut de Sergio Batista” como seleccionador confirmado hasta el próximo Mundial.

“Messi, destinado al protagonismo permanente, inventó el gol en la demorada victoria en el clásico sudamericano. Son esas victorias que se disfrutan de una manera especial”, mantiene.

Tras proclamarse campeón mundial sub’20, Messi debutó con la selección absoluta de Argentina a los 18 años, el 17 de agosto de 2005 ante Hungría, pero estuvo en el campo solamente 47 segundos porque, tras unos roces con el defensa Vilmos Vanczák, fue expulsado por el árbitro Markus Merk.

Participó en el Mundial de Alemania 2006, aunque el entonces seleccionador José Pekerman lo dejó en el banquillo en el partido de despedida de los argentinos ante los alemanes en cuartos de final, y un año después disputó la Copa América que la Canarinha ganó en la final contra Argentina.

Este año, en el Mundial de Sudáfrica, “hizo millonarios a varios porteros” que pararon todos sus intentos de marcar goles, según afirmó Diego Maradona, seleccionador argentino hasta la finalización de ese torneo.

EFE