Irvin Kershner, el director de la película de “La Guerra de las Galaxias” “El Imperio contraataca” y la cinta de James Bond “Nunca digas nunca jamás”, falleció. Tenía 87 años.

Kershner murió el sábado en Los Angeles tras sucumbir a una larga enfermedad, dijo Adriana Santini, una actriz radicada en Francia que es amiga de la familia. El cineasta deja dos hijos, añadió. Su agente, Derek Maki, también confirmó el deceso el lunes en un e-mail a la AP.

Kershner ya había realizado varias películas bien recibidas cuando George Lucas lo contrató para dirigir “El Imperio contraataca”, la segunda producida de “La Guerra de las Galaxias pero cronológicamente la quinta de la serie.

La producción de 1980 fue una historia más oscura que la original. En la misma, el héroe Luke Skywalker pierde una mano y descubre que el villano Darth Vader es su padre. Inicialmente la película obtuvo críticas mixtas, pero con el tiempo se convirtió en una de las más elogiadas.
Kershner le dijo a Vanity Fair en octubre que trató de darle al filme profundidad.

“Cuando finalmente acepté la tarea, supe que sería una película oscura, con mayor profundidad de personajes que la primera”, indicó.

“Tomó varios años que los críticos la entendieran y la vieran como un cuento de hadas más que como un libro de historietas”.

Kershner dijo que estuvo en desacuerdo con Lucas tan sólo en una cosa. En el guión original la heroína, la Princesa Leia, le decía al piloto espacial Han Solo “Te amo” y él le respondía “Yo también te amo”.
“Rodé la escena y simplemente no me pareció apropiado para el personaje de Han Solo”, relató Kershner.

En vez, el actor Harrison Ford mejoró la respuesta con un “Lo sé”.
Lucas quiso mantener la línea original, pero después de varias pruebas acordó dejar la respuesta de Ford, que hoy es una de las más conocidas de la serie.

Nacido en Filadelfia, Kershner estudió tanto música como fotografía y trabajó como ilustrador independiente antes de dedicarse al cine. Se graduó de la escuela de cine de la Universidad del Sur de California y en los años 50 hizo películas informativas para el gobierno estadounidense en Grecia, Turquía y el Medio Oriente.

Dirigió una serie documental de televisión titulada “Confidential File” en Los Angeles antes de filmar su ópera prima en 1958, cuando Roger Corman lo contrató para rodar el largometraje de bajo presupuesto “Stakeout on Dope Street”.

Las siguientes dos décadas dirigió numerosas películas, incluyendo “Un loco maravilloso” con Sean Connery, Joanne Woodward y Jean Seberg, “Un fabuloso bribón” con George C. Scott, “Loving” con George Segal y Eva Marie Saint, y “Los ojos de Laura Mars” con Faye Dunaway.

Además de “El Imperio contraataca”, sus filmes de gran presupuesto incluyeron el de James Bond de 1983 “Nunca digas nunca jamás”, con Connery, y “Robocop 2” en 1990.

Kershner, quien también actuó ocasionalmente, interpretó al cura Zebedee en “La última tentación de Cristo” de Martin Scorsese.

AP