China y Corea del Norte llegaron a un consenso sobre la crisis en la península coreana tras conversaciones “francas”, reportó la prensa estatal china, en las que analistas sugirieron que probablemente Pyongyang aceptó no empeorar la situación.
El encuentro se produjo en momentos en que Pekín y Washington riñen sobre la mejor forma de lidiar con el alza de tensiones en la dividida península, con China rechazando la presión estadounidense para que reprenda a su empobrecido aliado por el bombardeo del mes pasado a Corea del Sur.
La agencia de noticias china Xinhua dijo que el consejero de Estado Dai Bingguo se reunió en Pyongyang con el líder norcoreano Kim Jong-il, y “ambas partes llegaron a un consenso sobre las relaciones bilaterales y la situación en la península coreana tras conversaciones francas y profundas”.
La agencia norcoreana de noticias KCNA dijo que las conversaciones “versaron sobre el tema de aumentar las relaciones amistosas y de cooperación entre ambos países y una serie de asuntos de preocupación mutua”.
Park Young-ho, del Instituto de Unificación Nacional de Corea, estimó que “es difícil esperar mucho más del consenso que un acuerdo general en la necesidad de resolver la situación (…) de una forma pacífica y mediante el diálogo, y que no pueden tener un aumento en las tensiones”.
Wang Dong de la Escuela de Estudios Internacionales de la Universidad Peking señaló que “es difícil decir de qué se trata realmente el consenso mencionado por Xinhua, pero de las palabras ‘profundas’ y ‘francas’, creo que Kim Jong-il debe haber tenido una buena actitud hacia la reunión”.
“Dai pudo recibir cierta forma de promesa verbal de Corea del Norte de que no habrá escalada de parte suya, mientras que China pudo ordenarle a Kim Jong-il que tenga un gesto de buena fe para hacer volver a los otros cuatro países a la mesa de las conversaciones de seis partes”, agregó Wang.
Las conversaciones sobre el programa de armas nucleares de Pyongyang comprenden a las dos Coreas, China, Japón, Rusia y Estados Unidos, y han estado estancadas por unos dos años.
Corea del Norte quiere reanudar las charlas pero Washington y Seúl declararon que sólo considerarán volver cuando Pyongyang demuestre que es sincero sobre su desnuclearización. Reuters