Venezuela instaló el miércoles una nueva Asamblea Nacional que tendrá mayor presencia de la oposición, pero estará limitada por los poderes especiales que tiene el presidente Hugo Chávez para gobernar por decreto hasta mediados del 2012.

Frente a los 65 asambleístas de la oposición, que estaba ausente del organismo legislativo desde hace cinco años, el líder izquierdista tendrá 98, una mayoría que no le permite pasar leyes fácilmente como sucedió con la Asamblea que le otorgó plenos poderes en diciembre.

Las marchas y concentraciones, organizadas por el oficialismo y sus adversarios para acompañar la entrada de sus diputados a la sede de la Asamblea, transcurrieron sin incidentes en el polarizado país petrolero.

Los opositores han calificado como victoria política la obtención de 65 escaños, postura que ha sido satirizada por Chávez, quien en un intento por bajar las tensiones saludó la nueva conformación de la Asamblea.

«La política sin un contrincante, sin un antagonista jugando no es política, es cualquier otra cosa», dijo el militar retirado. «La batalla política, la batalla de ideas, bienvenida. Yo estoy contento con la nueva conformación de la Asamblea», señaló.

El ambiente en el salón de sesiones era de calma y los asambleístas, muchos de ellos vestidos con trajes típicos de sus regiones, esperaban que se revisen sus credenciales para asumir el cargo. Reuters