Los palestinos quieren que el Consejo de Seguridad de la ONU celebre la próxima semana la votación del proyecto de resolución de condena a los asentamientos que negocian desde el mes pasado, aseguraron hoy a Efe fuentes diplomáticas.
“En la próxima semana esperamos finalizarlo, presentarlo y que se vote”, indicaron las citadas fuentes, que advirtieron sin embargo de que se podría retrasar la presentación oficial del documento si se prolonga el diálogo con los miembros del máximo órgano de seguridad de la ONU.
En todo caso, agregaron esas mismas fuentes, la votación debería celebrarse antes de la reunión mensual sobre Oriente Medio que el Consejo de Seguridad tiene previsto para el próximo 19 de enero.
El documento, del que Efe obtuvo una copia, condena la continuación de las actividades en las colonias judías establecidas en los territorios ocupados de Cisjordania y Jerusalén este desde 1967, a las que califica de “gran obstáculo” para alcanzar la solución de los dos estados que impulsa la comunidad internacional.
El mes pasado la Misión de Observación palestina ante la ONU distribuyó el texto a los quince miembros del órgano de Naciones Unidas, así como a otros países, y desde entonces se han producido intensas negociaciones para conseguir su aprobación.
Se espera que algunos de los países integrantes del Consejo de Seguridad propongan cambios en el texto en los próximos días, con el fin de que logre reunir el mayor respaldo posible, indicaron fuentes diplomáticas.
El representante palestino ante la organización, Riad Mansur, así como embajadores de varios países árabes, se reunieron el pasado miércoles con el presidente de turno del Consejo de Seguridad, el embajador bosnio Ivan Barbalic, para hablar del proyecto de resolución.
Representantes de Bosnia también estuvieron en el encuentro que Mansur celebró el jueves con las delegaciones del Movimiento de los No Alineados (NAM), en la que también participó Brasil, que a su vez ocupa en la actualidad un puesto en el Consejo de Seguridad.
Además de condenar las colonias judías, el documento también pide una “intensificación” de los esfuerzos diplomáticos regionales e internacionales para apoyar y darle un nuevo vigor al proceso de paz, aunque no incluye ninguna mención a posibles sanciones para que Israel detenga la construcción de colonias.
La gran duda entre los diplomáticos palestinos es si Estados Unidos ejercerá su poder de veto para impedir la adopción de la resolución, a la que Israel se opone, pese a que Washington ha expresado reiteradamente su rechazo a la presencia de los asentamientos en territorio palestino.
El Departamento de Estado mostró el pasado 29 de diciembre su oposición a que el Consejo de Seguridad se pronuncie sobre asuntos que forman parte de las negociaciones entre las partes, pero no precisó si aprovechará su posición como miembro permanente de ese órgano de la ONU para bloquear la iniciativa palestina.
La votación puede colocar a la Administración de Obama en una situación comprometida, ya que por un lado se le pide que presione a Israel para que congele los asentamientos, mientras que por otro es reacia a dañar sus delicadas relaciones con el Gobierno del primer ministro israelí, Benjamín Netanyahu.
En una carta fechada el pasado 29 de diciembre, Mansour pidió al Consejo de Seguridad que “no flaquee” a la hora de “reclamar un cese completo de toda actividad de asentamientos por parte de Israel” en territorios ocupados.
Tras el fracaso a finales del año pasado de la nueva ronda de negociaciones con Israel auspiciada por Washington, las autoridades palestinas han tratado de conseguir el apoyo de la comunidad internacional a una declaración de un estado propio sin esperar a lograr un acuerdo de paz con los israelíes.
Por ahora el mayor apoyo lo ha obtenido en América Latina, donde países como Argentina, Brasil y Bolivia han reconocido “un estado palestino en las fronteras de 1967”, y otros han expresado públicamente su disposición a hacerlo.
EFE