Las autoridades establecieron la existencia de material explosivo con el cual pretendían dotar a una de las estructuras guerrilleras en el Cauca.
Los uniformados se desplazaron hasta la vereda El Charco Bajo, jurisdicción del municipio de Popayán, donde fueron hallados dos costales que contenían en su interior veinte granadas para mortero de 60mm, tres granadas de mano IM 26 y doscientos metros de cordón detonante.
Simultáneamente, fue ubicado un centro de acopio de material de guerra e intendencia en el sector de la vereda Quita Pereza, ahí, las autoridades encontraron 71 granadas de fragmentación IM-26 y cinco granadas para mortero pertenecientes al sexto frente que delinque en el norte del departamento.