Transmilenio sin plan para enfrentar emergencias; Personería procesará a los responsables
La Personería de Bogotá anunció hoy la apertura de investigaciones contra las directivas del sistema Transmilenio y de la administración Distrital, para establecer responsabilidades por no tener un plan de contingencia para enfrentar emergencias como la presentada el lunes pasado, cuando se estrellaron 3 articulados con un saldo de mas de 90 heridos.
La personería estableció que pese a que hace 14 meses advirtió las deficiencias, no se tomaron las medidas para corregirlas y estas continúan y, en algunos aspectos, han empeorado.
El informe de seguimiento determinó que no existe un Plan de Emergencia y Contingencia acorde con las necesidades del Sistema ni aprobado por el Fondo de Prevención y Atención de Emergencias (FOPAE).
Destaca que en portales y en las estaciones tampoco hay ambulancias, personal médico, extintores y botiquines suficientes, ni rutas claras de evacuación para funcionarios y usuarios en caso de un accidente, incendio, inundación, apagón o cualquier otro suceso de este tipo.
Se encontró, además, deterioro físico en los portales y estaciones que generan riesgos para los usuarios, así como falta de conductores de relevo en caso de percances y personal suficiente para orientar o enfrentar cualquier situación.
Por todo lo anterior, la Personería inició una investigación disciplinaria para determinar quiénes son los funcionarios responsables de la falta de gestión para proteger la vida de los usuarios del Sistema Transmilenio.
En su informe, la Personería hace además, las siguientes precisiones:
Primeros auxilios
Si bien sólo desde el 10 de diciembre de 2010 la Secretaría de Salud y la Empresa Transmilenio empezaron el cubrimiento con áreas de Primeros Auxilios en los portales, se determinó que esa atención es insuficiente y vulnera el Acuerdo 334 de 2008 que dispone la existencia de una unidad móvil dentro de cada uno de los portales para la atención de emergencias. La visita de la Personería encontró que en los portales de la Calle 80, del Sur, Usme y Tunal no había ambulancia. En Las Américas sólo se encuentra en horas valle y los únicos que tenían la móvil fueron los portales del Norte y Suba.
También se establece que en los portales deben existir dos técnicos en atención prehospitalaria y un auxiliar de enfermería, sin embargo, en los portales del Sur, Usme y Suba no se encontraron técnicos durante las visitas. En la Calle 80 y Las Américas sólo había uno y en el Tunal y Norte sí los había.
Adicionalmente, pese a que el horario de Transmilenio es de 5:00 a.m. a 11:00 p.m., los auxiliares de enfermería que se encuentran en cada portal sólo están de 7:00 a.m. a 7:00 p.m. En caso de una emergencia a otra hora no hay personal especializado; pero, el Distrito informó que destinó cinco motocicletas con equipo de salud para ese fin.
Botiquín
En cuanto a los botiquines en las estaciones se encontró que su estado no es el adecuado; los medicamentos están almacenados en bolsas plásticas altamente contaminadas; las llaves están a cargo de empleadas de taquilla, que no están entrenadas para su manejo y no disponen de tiempo cuando se requiere abrirlo.
Durante la visita a la estación de la Avenida Jiménez el botiquín casi no se puede abrir y cuando se logró estaba sin medicamentos. En Ricaurte se encontraron dos medicamentos vencidos desde 2010. En La Alquería se halló en el botiquín una botella que contenía blanqueador; en la Calle 19, Museo del Oro, Biblioteca El Tintal y Transversal 86, a los botiquines les faltaban varios elementos.
Extintores
Para el manejo de los extintores las llaves son manejadas por los líderes de los portales o vigilantes, lo que impide su uso inmediato en caso de emergencia.
En la plataforma No. 2 del portal del Sur no se observó extintor en ninguno de los dos extremos, en la estación Santander el extintor venció su carga en marzo de 2011, en El Virrey y Calle 85 no se pudo acceder a ellos porque las llaves no funcionan y no hay elemento contundente alguno para romper el vidrio en caso de emergencia.
Sin mapas claros
Según la FOPAE, debe existir una señalización adecuada en los lugares donde exista aglomeración para garantizar la seguridad del público. Las salidas y entradas de emergencia deben identificarse, así como las rutas de evacuación y los sitios seguros.
Durante las visitas a las estaciones y portales, se encontró que en muchos no existen mapas que indiquen hacia dónde dirigirse en caso de emergencia ni puntos de encuentro. Tampoco existe señalización para instruir sobre la manera como se debe evacuar.
Dentro de los portales y estaciones visitados la insuficiente infraestructura y la falta de fluidez en el servicio no permiten siquiera el tránsito de las personas en algunas horas, lo que representa un alto riesgo para los usuarios que tampoco encuentran señalización y personal suficiente para mitigar el peligro al que se exponen.
Cuando las personas se ubican después de la raya amarilla para abordar el bus no hay ningún tipo de control por parte de los encargados de Transmilenio. En algunas horas no se tiene el personal suficiente que apoye al usuario para ubicar rutas de los buses. Algunos mapas se encuentran dañados, sin información o no son claros. Esta situación contribuye a la aglomeración y a la sensación de inseguridad para el usuario.
Las puertas automáticas de las estaciones presentan fallas frecuentes. No hay apertura automática o no cierran, ocasionando riesgo para los usuarios al quedar expuestos al vacío sin ninguna protección como ocurre en Banderas, Santander, Avenida Jiménez, Calle 19, Calle 100, El Virrey, Calle 85 y Shaio, entre otras.
Para activar la puerta exclusiva de discapacitados se requiere informar al personal de la estación. Este procedimiento genera traumatismos para el usuario que debe esperar hasta que el funcionario tenga tiempo para atenderlo.
Deficiente estado
Otras situaciones que también atentan contra la seguridad de los usuarios es el deficiente estado de algunas estaciones y portales. En el portal de la Calle 80 las escaleras que conducen a las personas al túnel presentan, desde hace más de un año, goteras y filtraciones de agua sin señalización de peligro por encontrarse en mal estado. Allí el ascensor se cierra inmediatamente obstruyendo el ingreso de pasajeros.
En la Avenida Jiménez las bandas del piso se encuentran dañadas y el ascensor no funciona generando problemas a los discapacitados. En el portal del Sur algunos cables de la luz se encuentran por fuera de las tapas; el ascensor se encuentra sin habilitar y no hay teléfono público en la plataforma 2. En Santander la iluminación del vagón 2 está dañada, generando riesgo en las horas de la noche. En Usme se realizan obras civiles sin señalización de prevención para los usuarios, hay escape de agua y los pisos y las plataformas están en mal estado. Y en el portal del Norte, finalmente, en los pisos existen fisuras y huecos, humedades con goteras y la señalización de la raya amarilla está borrada.