El Tribunal de Santa Rosa de Viterbo, Boyacá, en fallo de segunda instancia, condenó a 33 años y nueve meses de prisión a Alirio Castro Sisa por el homicidio de su compañera permanente, Nidia Yazmín González Rativa.
Los hechos ocurrieron el 18 de mayo de 2008, cuando en el río Gameza, sector de Puente Reyes del municipio de Gameza, Boyacá, fue encontrado el cuerpo sin vida de González Rativa, quien el día anterior le alcanzó a comentar a su madre la amenaza de muerte que luego de una discusión le profirió el hoy condenado.
El 29 de julio de 2009, Castro Sisa fue capturado, asegurado e imputado por homicidio agravado. Sin embargo, el 28 de febrero de 2011 el Juzgado Segundo Penal Circuito de Sogamoso, Boyacá, absolvió al procesado, decisión apelada por el fiscal a cargo del caso.
La Fiscalía estableció durante la investigación que Castro Sisa tenía antecedentes de violencia intrafamiliar, que en varias ocasiones había golpeado a la víctima, en una de las cuales le fracturó tres costillas, con lo que demostró que la relación sentimental era violenta y traumática.
El juez de segunda instancia consideró que la Fiscalía había demostrado el indicio de oportunidad para delinquir, teniendo en cuenta la amenaza de muerte proferida, el historial de agresiones en contra de González Rativa y que los golpes que recibió la víctima fueron propinados por alguien con conocimiento de técnicas de pelea, ya que le fracturaron el hígado y el páncreas, estableciendo que Castro Sisa era cinturón negro en karate.
Por determinación del juzgador, el hoy condenado está recluido en la cárcel de Sogamoso.