Una nueva tragedia causó esta madrugada el invierno, ésta vez en zona rural de la ciudad de Santa Marta, en el departamento del Magdalena, donde se produjo una avalancha del río Guachaca que arrasó quince viviendas y se reportan hasta ahora 6 personas desaparecidas.

Los primeros informes de los organismos de socorro indican que la emergencia se registró en el corregimiento Guachaca, como consecuencia del represamiento del río del mismo nombre en la parte alta de la Sierra Nevada de Santa Marta.

Entre las personas desaparecidas hay una niña de 10 años y 5 adultos, cuya búsqueda se reanuda a esta hora.

El director de la Defensa Civil en el Magdalena, el mayor Eduardo Vélez, confirmó en declaraciones a Radio Santa Fe, que la avalancha se produjo tras una creciente súbita del río Guachaca y que además de
arrasar 15 viviendas, afectó otras 50.

Añadio que 300 familias resultaron damnificadas y que el corregimiento quedó aislado porque se cayó un puente y sin acueducto y sin servicio de energía eléctrica.

El fuerte aguacero caído la víspera también causó inundaciones en sectores urbanos de la capital del Magdalena, entre ellos Malvinas y Tairona.

EN NARIÑO

Mientras tanto, al otro extremo del país, en el municipio de la Cruz, en el departamento de Nariño, siguen hoy las operaciones para recuperar los cuerpos de 13 personas que continúan desaparecidas como consecuencia del derrumbe y las avalanchas causadas por el río Mayo hace 3 días.

Ayer fueron sepultados los cuerpos de los dos menores que fueron rescatados tras la destrucción de un caserío en la vereda Moncayo.

En las últimas horas se logró ubicar en la zona una excavadora enviada desde Pasto para facilitar las tareas de remoción de los aludes de tierras y rocas.

“Con esta máquina se podrá agilizar la búsqueda de los desaparecidos, que a pico y pala es muy difícil, porque hay mucha roca y escombros naturales”, expresó el alcalde de La Cruz, Alexander Realpe.

El funcionario añadió que las condiciones son muy difíciles en el sector, con el agravante de que las lluvias siguen, pero
subrayó que el propósito es hallar a todas las víctimas, “para que sus familiares les puedan dar cristiana sepultura”.