Presunto miembro del Ejército sigue libre, después de atentar contra taxista en el nor occidente de Bogotá
Ochos días se cumplen después del intento de homicidio que fue objeto el conductor de taxi que fue agredido por un presunto sub oficial del Ejército Nacional, en hechos que se registraron el pasado domingo 18 de diciembre, sin que las autoridades judiciales hayan movido un solo papel contra el uniformado.
El bandido identificado como Luís Gerardo Puentes, salió esa noche en compañía de un familiar en el nor occidente de la capital, después de un largo recorrido por la ciudad y luego de llegar a su casa en el barrio Plazuelas del Virrey, el desadaptado no quiso pagar el valor real de la carrera, por lo cual desenfundó su arma y le propinó un tiró en la cabeza a Carlos Eduardo López.
López, que esa noche estaba de cumpleaños le dijo a su esposa que iba a trabajar un rato para conseguir el producido del día, por lo que tomó su taxi desde el norte de Bogotá, con tan mala fortuna que ese mismo día irían a terminar sus días como conductor de los amarillos.
Su esposa Julieth Sánchez, ha denunciado que el día de los hechos el caso fue conocido por un subintendente de apellido Cuartas, quien en compañía de sus compañeros de la patrulla adscrita a la Estación de Engativá, condujeron al sub oficial del Ejército momentos después que se escondió en la casa a la Unidad de Reacción Inmediata de la Fiscalía de este sector, pero que ese mismo día el fiscal de turno lo dejó en libertad, sin que hasta la fecha se haya tomado una acción legal contra este miembro de la Fuerza Pública.
“Es vergonzoso que la URI de Engativá no haya hecho absolutamente nada y no se entiende como la misma Policía se haya prestado para facilitarle las cosas al señor Luís Gerardo Puente para que lo hayan puesto en libertad de manera inmediata”, agregó la esposa del conductor herido.
Lo cierto es que hasta la fecha a Carlos Eduardo López se le han practicado dos cirugías, esté fuera de peligro, pierda su ojo derecho y no pueda volver a manejar taxi y este presunto miembro del Ejército esté en las calles riéndose de la justicia; quien será la próxima víctima de este uniformado?
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