Dos incendios forestales en el sur de Chile dejaron un muerto y casi 23.000 hectáreas arrasadas, al tiempo que se declaró otro en la región del Maule, en una situación de emergencia provocada por una inusual ola de calor y sequía, según las autoridades.
En las comunas de Florida y Quillón, en la región del Biobío, unos 500 km al sur de Santiago, las llamas habían arrasado 10.000 hectáreas y dejaban una persona muerta, confirmó el presidente, Sebastián Piñera, al entregar este lunes un balance oficial en la Oficina Nacional de Emergencias (Onemi).
La víctima es un adulto mayor que no quiso evacuar el lugar y falleció quemado en su vivienda, dijo Piñera.
Además, el fuego quemó más de 100 viviendas, lo que motivó la evacuación de 500 personas y arrasó con una planta de paneles de la empresa Celulosa Arauco, agregó el mandatario.
“De las cinco plantas que componen el complejo productivo, sólo una está afectada (paneles plywood) y ya se tomaron los resguardos necesarios para proteger la planta de celulosa, aserraderos y otras”, dijo la compañía, propiedad de la empresa Copec, en un comunicado.
El incendio tomó fuerza en las últimas horas debido al fuerte viento y las altas temperaturas que se registran en la zona, los mismos factores que ayudaron a expandir las llamas en el parque nacional Torres del Paine, en la Patagonia chilena, más de 3.000 km al sur de Santiago.
“Desgraciadamente, por la sequía y la ola de calor, tenemos una situación de extrema vulnerabilidad en materia de incendios”, dijo Piñera.
El siniestro en Torres del Paine estalló el martes pasado y hasta este lunes había consumido 12.795 hectáreas. Cuatro de sus seis focos activos se encontraban en proceso de control, según Piñera.
“En este instante, de los seis focos de incendio, cuatro se encuentran en proceso de control, es decir, no están creciendo. Esto no garantiza que no podamos tener nuevos eventos por las malas condiciones climáticas”, dijo el mandatario.
“Los otros dos focos de incendio no se están expandiendo, pero tenemos que todavía trabajar para llegar a una situación de control”, agregó.
En el lugar trabajan 753 brigadistas y se prepara la reapertura parcial del parque en los próximos días, en el sector norte, sobre un área de entre 100.000 y 150.000 hectáreas, las más visitadas por los turistas.
“Estamos preparándonos para iniciar un proceso de reapertura parcial del parque”, señaló Piñera.
El parque nacional está ubicado en la provincia de Puerto Natales, a unos 3.000 km al sur de Santiago y tiene una extensión total de unas 230.000 hectáreas.
Las autoridades han acusado al ciudadano israelí Rotem Singer, de 23 años, de haber causado el fuego tras haber actuado de forma negligente apagando un rollo de papel higiénico, aunque él niega los cargos.
El joven fue detenido el sábado y liberado provisionalmente a las pocas horas, aunque se le prohibió abandonar la región. Se arriesga una pena de entre 40 y 60 días de cárcel y una multa máxima de unos 300 dólares.
Las bajas penas llevaron al presidente Piñera a anunciar “una profunda modificación” de la legislación de protección de bosques, aumentando las sanciones para aquellos que provoquen incendios de manera intencional y también para aquellos que lo hagan por negligencia.
Mientras, en las últimas horas se registró un tercer foco en la región del Maule, unos 400 km al sur de Santiago, en las zonas de Quirihue y San Luis, las que al igual que los focos en Biobío y Torres del Paine fueron declaradas en ‘alerta roja’.
Contabilizando estos tres incendios, en todo Chile había hoy 15 incendios activos de diversas magnitudes. AFP
Comments are closed.