Nuevamente la reconocida y bella actriz colombiana Martina García incursiona con la cinta “La cara oculta”, una propuesta que deja entrever como ha venido creciendo a nivel nacional e internacional en el séptimo arte, a pesar que vive en parís, la esperanza de los colombianos es verla a partir de este viernes en las principales salas de cine.
Quisiéramos los amantes del cine, que las tramas del cine colombiano no fueran siempre narcotráfico y sexo. En la cara oculta, es precisamente el lunar de este trabajo de su director Andrés Baiz, quien dejará entrever que la historia gira en torno a un idilio de amor, mezclado con sexo, donde un músico en medio de los celos y desaparición de su novia, busca refugiarse en los brazos de una tercera mujer.
Adrián (Quim Gutiérrez) el atractivo director de la Orquesta Filarmónica de Bogotá, y su novia Belén (Clara Lago) parecen estar muy enamorados, pero cuando Belén empieza a dudar de su fidelidad, desaparece sin dejar rastro.
Como en todo lío pasional, el protagonista (Adrián), encuentra consuelo tanto en su música como en los brazos de una hermosa camarera, Fabiana, (Martina García), y a medida que la pasión entre ellos crece, las preguntas sobre la desaparición de Belén comienzan a aflorar y el pasado de Adrián estará más presente de lo que nunca pudieron imaginar.
Para la realización de este trabajo, Baíz contó con la experiencia de Quim Gutiérrez, uno de los mejores actores de nuestro actual panorama, como Clara Lago y Martina García.
La bella bogotana es una de las actrices con más reconocimiento en Colombia y de mayor proyección en Latinoamérica, su incursión en la televisión nacional se dio en la serie Francisco el matemático, para luego participar en producciones como Rosas del atardecer, María madrugada, la guerra de las rosas, donde interpretó a Caperuza, una adolescente incomprendida, papel con el que obtuvo una nominación a los premios India Catalina en la modalidad Mejor actriz revelación y otra más en los premios TV y Novelas en la misma categoría, en el año 2000.
Mientras que residía en Edimburgo, recibió por correo electrónico el perfil de Rita y tres escenas para la audición de Amor a la plancha, envió su propuesta y en marzo ya estaba grabando la telenovela que fue dirigida por Mario Ribero y que le permitió evolucionar y consolidarse en el mundo de la televisión.
Participó en la serie La saga, negocio de familia y más recientemente en un capítulo de la serie de Fox, Tiempo Final, para luego actuar en el seriado español Plan América.
Hizo sus pinitos en el cine cuando la llamaron para trabajar en Perder es cuestión de método de Sergio Cabrera, donde encarnó a “Quica”, una joven prostituta de 18 años que ha aprendido a manejar el bajo mundo como si fuera un juego de muñecas.
Hizo su primer papel con Andy Baiz en la cinta Satanas, donde interpretó a Natalia, la alumna de inglés que Eliseo asesina a puñaladas y donde compartió escena con el mexicano Damián Alcàzar, cinta que recreó la dolorosa masacre del restaurante Pozeto en el norte de Bogotá.
Así las cosas, Martina García, la actriz con mayor proyección a nivel internacional, regresará esta temporada de comienzos de año, para el deleite de quienes creen en su creciente talento con La cara oculta, pues es de aquellas mujeres que no se comprometen con papeles mediáticos y de poca permanencia en la retina de los amantes del séptimo arte, por eso no hay que dejar de verla.