Otros 67 integrantes de la banda criminal autodenominada Ejército Revolucionario Popular Anticomunista de Colombia, ERPAC, dejados en libertad tras la desmovilización cumplida a finales del año pasado en los Llanos, fueron recapturados por la Policía Nacional en desarrollo de operaciones cumplidas en regiones del Meta, Cundinamarca y Bogotá.

El director de la policía nacional, general Oscar Naranjo, indicó, además, que en uno de los operativos cumplido en el municipio de Mapiripán, en el Meta, fueron desmanteladas seis caletas de la organización criminal en las cuales se encontró un poderoso arsenal, dentro del cual se destacan más de 100 armas de largo alcance y abundante munición.

Los 67 recapturados hicieron parte del grupo de 208 integrantes del ERPAC que se sometieron masivamente a la justicia, buscando beneficios judiciales.

Sin embargo, por no tener antecedentes judiciales, los jueces de control de garantías los dejaron en libertad.

En esa oportunidad también se entregó el máximo cabecilla del ERPAC, identificado como José López Montero, alias ‘Caracho’.

Este sujeto heredó la jefatura de la banda tras la muerte de alias ‘Cuchillo’, ocurrida en diciembre de 2010.

El autodenominado Ejército Revolucionario Popular Anticomunista de Colombia (ERPAC) surgió tras la desintegración de las autodefensas.

Fue una de las 4 bandas criminales emergentes al servicio del Narcotráfico (BACRIM) más poderosas junto a los «Rastrojos» de alias «Comba», las Águilas Negras y «Los Urabeños».

Fue liderado por los Narcotraficantes Pedro Oliviero Guerrero Castillo alias «Cuchillo» y Daniel Barrera Barrera alias el «Loco Barrera».

Según las autoridades, esta organización ocupó los espacios tanto militares como de narcotráfico del Bloque Centauros de las llamadas Autodefensas Unidas de Colombia, luego de dar muerte a su máximo comandante, Miguel Arroyave.