Después del trágico episodio en el que se vio envuelto un uniformado de la Policía Bogotá con la muerte del estudiante Diego Felipe Becerra el pasado 19 de agosto y en el cual siguen siendo oscuras las justificaciones que han dado quienes se encontraban comandando esta institución, este domingo vuelve juega con otro caso, pero esta vez en el sur de la ciudad.

Se trata de un joven de 17 años de edad que salía de una fiesta con sus amigos, quien se vio envuelto en una riña callejera y que al ser requerido por las patrullas del sector, se molestó y trató de agredir a uno de los uniformados, según señalaron los testigos del caso.

Wilson Cruz, familiar de la víctima indicó que el hecho se registró en la localidad de Bosa, después que el menor salió de una fiesta y que por una presunta riña entre los policías, éste quedó mortalmente herido por arma de fuego, que le causó la muerte.

“Mi sobrino estaba en una fiesta y se formó una pelea entre él y unos policías que le pidieron unos papeles. Lo que me dijeron es que mi sobrino sacó un machete y lo rastrilló contra el piso y el policía le pegó un tiro” agregó el tío del joven muerto.

Para mayor claridad, los hechos fueron puestos en conocimiento de manera inmediata a la Fiscalía General de la Nación, para que iniciara la investigación que lleve a dar claridad de los verdaderos acontecimientos que se desprendieron después de una riña.

A su vez el coronel Rubén diario Castillo, comandante de servicios especiales de la Policía, señaló que aún no se puede hacer ningún juicio sobre los hechos y agregó que por eso la Fiscalía está encargada del caso para garantizar que no se oculte ningún tipo de información.