Este jueves comenzó a funcionar en Holanda la primera clínica privada para practicar la eutanasia desde unidades móviles comenzó.

De acuerdo a Walburg de Jong, la portavoz de la Asociación para la Muerte Voluntaria en Holanda (NVVE), que patrocina la clínica, sólo hoy se recibieron 11 peticiones, lo que podría indicar que la clínica será todo un éxito.

Una vez, la clínica recibe la petición, un médico y una enfermera evalúan si la misma se ajusta a los requisitos legales y si es así, de inmediato establecen contacto con el enfermo y los familiares para empezar los respectivos trámites.

Walburg de Jong manifestó que el médico de cabecera, “en muchos de estos casos ha rechazado proceder con la eutanasia bien por motivos éticos, o por falta de experiencia o miedo a no cumplir cuidadosamente con todos los preceptos marcados por la ley”.

Sin embargo, para esto fueron creados este tipo clínicas que buscan cubrir los casos rechazados por los galenos.

La NVVE actualmente está construyendo una clínica en La Haya a la que podrán ser trasladados los solicitantes de eutanasia cuya salud no les permita morir en sus propias casas.

Aproximadamente, la Asociación recibe al menos un millón de solicitudes de eutanasia, especialmente de enfermos de cáncer.

Vale la pena recordar que en Holanda la eutanasia es permitida en los casos aprobados por la ley y quien la aplique fuera de la misma, se puede enfrentar a una pena de 12 años de prisión.

Las principales exigencias para aplicarla son:
Padecer una enfermedad incurable
Tener un dolor insoportable
Que sea pedida en pleno uso de razón cuando piden que se les practique la eutanasia.

Además de Holanda, la eutanasia está legalizada en Bélgica, Luxemburgo, Suiza y en Estados Unidos en los estados de Montana, Washington y Oregón.