Las autoridades confirmaron la captura de un hombre que el lunes asesinó a siete personas en un colegio religioso en una universidad de Oakland, en las afueras de San Francisco.

La policía anunció la detención del presunto autor de los disparos. “Un hombre armado entró en la universidad y abrió fuego en varias ocasiones”, declaró una portavoz oficial.

Minutos más tarde, la policía anunció en su cuenta de Twitter que detuvo “a un sospechoso” a unos 7 kilómetros del lugar. El presunto culpable es “de origen asiático”, según informaron medios locales.

El atacante, un ex estudiante del curso de enfermería que se imparte en el centro educativo, se entregó a la policía en un centro comercial, a unos pocos kilómetros de la institución.

El mortífero ataque, del cual aún se desconocen las causas reales, se produjo en la Universidad Oikos, donde se dicta medicina, enfermería, música y estudios religiosos.

El pastor Jong Kim, fundador de la universidad, confirmó al diario norteamericano Oakland Tribune que el atacante fue estudiante de enfermería de la institución. Kim no sabía si el hombre fue expulsado de la universidad o si abandonó voluntariamente los estudios.

Citando a familiares de una de las víctimas heridas, el diario indicó que el hombre volvió ayer a la universidad tras meses de ausencia. Ordenó a sus ex compañeros colocarse contra la pared, entonces sacó un arma.

“Las personas huyeron y él comenzó a disparar”, dijo Gurpreet Sahota, cuya cuñada sufrió una herida de bala en el brazo”.

Cinco personas murieron en el lugar, mientras que dos fallecieron posteriormente a raíz de las heridas, precisó el jefe de la policía de Oakland, Howard Jordan.

Además, tres estudiantes están recibiendo tratamiento médico por las heridas de balas sufridas, pero están fuera de peligro.

Santa Fe con agencias