Rectores universitarios, organizaciones juveniles, la sociedad civil y entidades gubernamentales del orden Distrital, firmarán un pacto para que las universidades de Bogotá se conviertan en espacios 100% libres de humo, durante el primer encuentro que se realizará hoy sobre esta temática.

El primer Encuentro “Universidades 100% libres de humo”, realizado por la Red sin Trabas Distrital, con el apoyo técnico del Instituto Nacional de Cancerología y la Secretaría de Integración Social, busca garantizar los derechos que tienen los ciudadanos y ciudadanas, en especial los niños, niñas y adolescentes y la población no fumadora de disfrutar un medio ambiente sano.

Durante el encuentro, se entregarán herramientas efectivas basadas en evidencia científica para implementar este tipo de espacios sin humo de tabaco al tiempo que se presentarán las experiencias exitosas de algunas universidades de la capital colombiana.

Cifras de interés de Bogotá

Un estudio realizado por la Secretaría de Salud de Bogotá y el Ministerio de la Protección Social indicó que en la capital hay 1,2 millones de fumadores habituales.

La investigación determinó que el consumo de cigarrillo se inicia a los 12 años y que es la puerta para iniciar el consumo de otras sustancias como la marihuana y la cocaína. Según la Secretaría de Salud, cada año mueren unas 400 personas por enfermedades asociadas al tabaco.

Los registros de mayor consumo de cigarrillo se presenta en las localidades de Suba y Usaquén (42,3% y 41%, respectivamente), mientras que las más bajas se reportan en las localidades de Usme y Ciudad Bolívar (29% y 31%)

El humo de tabaco tiene más de 7000 sustancias tóxicas, incluyendo monóxido de carbono, que constantemente son liberadas al aire que todos respiramos. También Aumenta el efecto invernadero, con una producción mundial de 225.000 toneladas de CO2, la misma cantidad que producen 12.000 automóviles que realizan 10.000 Km. cada uno.

Las colillas de cigarrillos, son generalmente tiradas al piso, cuando llueve son arrastradas a las alcantarillas y de ahí pasan a las fuentes de agua que luego consumimos todos, especialmente peces y animales que las confunden con comida y se las tragan provocando muchas veces su muerte y alterando el ciclo ecológico. Ríos, lagos y mares son contaminados.